Por Gustavo Martínez Puga
El abogado Horacio Alday sufrió un revés judicial en su intento aislado de zafar definitivamente en la causa principal del escándalo de las expropiaciones, donde la justicia de primera instancia ya falló que habría una asociación ilícita liderada por el abogado Santiago Graffigna para saquear las arcas del Estado sanjuanino inflando causas de expropiaciones.
Alday y Graffigna fueron socios y compartieron un estudio jurídico. En un primer momento de la investigación judicial, Alday estuvo imputado del mismo delito que Graffigna: jefe de la asociación ilícita que habrían integrado jueces, funcionarios y abogados.
EL CAMINO LEGAL
A diferencia de Graffigna, quien cayó detenido y aún está con prisión domiciliaria, Alday nunca estuvo preso. Durante 10 meses se mantuvo en la clandestinidad cuando lo buscaban para meterlo preso por esa imputación judicial.
Pero esa imputación de jefe de asociación ilícita fue apelada y un tribunal de la Sala II de la Cámara Penal le bajó la calificación de jefe a integrante de la asociación ilícita. Eso le permitió que le dieran la excarcelación. Cuando su libertad estuvo asegurada, el abogado Alday se presentó al Quinto Juzgado de Instrucción a dar su versión de los hechos.
Todo esto ocurrió cuando la jueza era María Inés Rosellot. Luego ella se jubiló. El Quinto Juzgado de Instrucción estuvo subrogado por el juez Benito Ortiz, quien indagó al abogado Alday el 30 de junio de 2014.
Con la intención de demostrar su inocencia, el 1 de octubre de 2014 y el 3 de febrero de 2015, el abogado Alday aportó más pruebas a la Justicia.
El actual juez del Quinto Juzgado de Instrucción, Benedicto Correa, fue designado con posterioridad a esa indagatoria. Y actualmente resta que resuelva sobre los nuevos hechos que se desprendieron de las investigaciones sus jueces antecesores, Rosellot y Ortiz.
Ahora el abogado Alday le pidió formalmente al juez Correa que lo sobresea, lo que legalmente significaría desvincularlo para siempre del escándalo de las expropiaciones. Ese pedido fue hecho en forma solitaria por Alday, ya que el resto de los imputados que están en su misma situación están esperando a que el juez emita una resolución y no fueron a pedirle una definición puntual en base a lo que declararon.
Indudablemente, el abogado Alday está convencido que es inocente y por eso pide el sobreseimiento de la mayor causa judicial en la historia de San Juan.
EL REVÉS
Sin embargo, su planteo no tiene nada que ver con lo que termine resolviendo el juez Correa.
Por ahora, ése magistrado le dio un revés al abogado Alday, con argumentos claros de su postura sobre el porqué no corresponde que zafe definitivamente del escándalo.
Según fuentes judiciales, el juez Correa resolvió que "el dictado del sobreseimiento solo procede frente a la completa inocencia del imputado, no cabe decretarlo si existen indicios de virtualidad suficiente para sospechar de la culpabilidad del mismo, ya que entiendo que la indudabilidad de responsabilidad penal se da tanto por la concurrencia de prueba de que el imputado no cometió el hecho, estado este que aún no se ha logrado en autos, en atención a lo precedentemente expuesto en cuanto a la prueba pendiente de producción”.
Antes de tomar esa resolución, el juez Correa le había corrido vista al fiscal Carlos Rodríguez y a la parte querellante (el Gobierno de San Juan), quienes también se negaron a que el abogado Alday fuera sobreseído de la causa principal.
En la otra causa, en veremos
En la llamada "causa conexa”, en la que los abogados Alday y Graffigna están sospechados de haber estafado a sus clientes en causas de expropiaciones, Alday había sido sobreseído por el juez Benedicto Correa. Pero la fiscalía no estuvo de acuerdo con esa resolución, ni la querella tampoco, por lo que apeló ante el tribunal superior en la Sala II de la Cámara Penal. Aún no resuelven.