Un jubilado será llevado a juicio por abusar sexualmente de su hija adolescente durante dos años. Así lo solicitó el fiscal del caso, que entiende que este calingastino debe ser juzgado por los delitos de abuso sexual gravemente ultrajante, por el vínculo y la situación de convivencia.
El hombre de 68 años, al cual no se lo identifica para preservar a la víctima, actualmente se encuentra alojado en el penal de Chimbas. El pedido lo hizo el fiscal Carlos Rodríguez al juez Guillermo Adárvez, del Tercer Juzgado de Instrucción. El abogado Claudio Vera, el defensor, puede oponerse y pedir más medidas de pruebas.
El caso tiene un trasfondo de violencia familiar. Hay testimonios que indican que el jubilado golpeaba a sus hijos y a su esposa, más cuando tomaba alcohol. Su mujer lo denunció por violencia de género. Además, aseguraron que el sujeto no permitía que su mujer y sus hijos mantuvieran contacto y amistad con los vecinos.
Aseguraron que el sujeto no permitía que su mujer y sus hijos mantuvieran contacto y amistad con los vecinos.
La adolescente se animó a hablar sobre los abusos sexuales, justamente, el día que su mamá fue a denunciar a su padre por otra de sus agresiones. Eso fue en octubre de 2020. La investigación se inició en el centro ANIVI y el juez Adárvez dispuso medidas de prueba, como el testimonio de la víctima.
La chica relató en Cámara Gesell que su padre empezó a someterla mediante manoseos cuando ella tenía 14 años y que en ocasiones la sometía en su cama. Estos abusos se extendieron hasta que ella cumplió los 15. Los informes psicológicos revelaron que la joven presenta indicadores de haber sufrido abusos sexuales. En base a estas pruebas, el fiscal pidió la elevación a juicio.