En Estados Unidos un preso, de nombre Jonathan Watson, está condenado a cadena perpetua desde el año 2009. Pero ahora protagonizó un nuevo capítulo ya que mató a dos compañeros de celda, pedófilos. "Son una pesadilla", dijo luego.
Para continuar, suscribite a Tiempo de San Juan. Si ya sos un usuario suscripto, iniciá sesión.
SUSCRIBITEEn Estados Unidos un preso, de nombre Jonathan Watson, está condenado a cadena perpetua desde el año 2009. Pero ahora protagonizó un nuevo capítulo ya que mató a dos compañeros de celda, pedófilos. "Son una pesadilla", dijo luego.
De acuerdo a lo indicado por medios internacionales, en el año 2020 a Watson se lo trasladó a un centro penitenciario de Nivel 2 por su buena conducta. En ese lugar tenía más libertades que en el nivel 3 en donde había gente de máxima peligrosidad. Así que pasaba de estar solo en una celda, a tener compañeros.
Fue ahí que empezó el problema, ya que se enteró que sus nuevos compañeros, David Bobb y Graham De Luis-Conti, eran dos condenados por agresión sexual agravada contra menores de 14 años.
Watson enfureció y directamente asesinó a palazos a los dos pedófilos. Horas antes de quitarles la vida, el recluso pidió ser devuelto al nivel 3 antes de que les diera "una paliza a estos tipos". Pero quien escuchó la orden, "se burló y marchó". Cuando volvió a su celda vio que Bobb veía programas de televisión para niños. Acto siguiente, lo cuestionó y tomó un bastón, con el que finalmente lo mató a golpes.
Posteriormente, se dirigió a un funcionario de la cárcel para entregarse, pero por el camino se encontró a De Luis-Conti, traficante de menores de edad. Lo mató con el mismo palo al que había asesinado al otro encarcelado. Orgulloso con lo que había hecho, envió una carta a un periódico estadounidense donde escribió: "Estos individuos son la peor pesadilla de cualquier padre".
Contenido especial