El Banco Nación pidió a un juez que intervenga para frenar una supuesta maniobra de vaciamiento que realizan las autoridades de Vicentín, la cerealera que le debe a la entidad u$s300 millones. Las autoridades del banco denunciaron que la empresa se dispone a vender Friar, una de las unidades económicas más rentables y que además es especialmente conocida por los sanjuaninos, ya que tiene sucursal en la provincia y es junto a la mostera ENAV uno de los vínculos locales de la empresa.
Tras meses de escándalos, Vicentín sumó un nuevo capítulo cuando se conoció que vendió la mitad del frigorífico Friar al fondo Buenos Aires Finantial Capital y los fondos que obtuvo de esto fueron transferidos a Uruguay. Las aturidades del Banco Nación tomaron esto último como lo más grave, ya que este dinero podría haber servido para achicar la deuda que tienen con ellos y cambio lo sacaron del país.
El presidente del banco, Eduardo Hecker, aseguró que la cerealera concursada "continúa con el desprendimiento de sus activos, en una clara maniobra para evitar la cancelación de los créditos, lo que constituye un importante perjuicio para el patrimonio del Banco”.
Por eso el banco decidió ir a la Justicia por partida doble: por un lado pidieron al juez Julián Ercolini y al fiscal Gerardo Pollicita que se investigue la venta y también presentarán la situación ante Fabián Lorenzini, el titular del Juzgado que tramita el concurso en Reconquista, Santa Fe.
El próximo lunes está prevista una audiencia donde las autoridades aceptarán o no investigar las acciones del directorio de Vicentín. A esa situación se suma el informe presentado en el Concurso Preventivo por KPMG, la auditora internacional, quien se negó a continuar como auditora externa del grupo.
Por último, Hecker volvió a exigir la presentación del balance de 2019 que es “imprescindible” para determinar la situación patrimonial del Grupo Vicentin y la adopción de medidas judiciales que impidan que la empresa se desprenda de activos.
(Con información de ámbito.com)