El dólar llegó a tocar los $14,25 en su mayor avance tras la devaluación de mediados de diciembre. Luego se recortó la escalada inicial y la moneda se estabilizó en $13,75 para los bancos y los grandes inversores y a $14 para el público.
El fin de año fue más tranquilo de lo que esperaba el propio gobierno, pero enero arrancó con una suba de alrededor de 57 centevos.
La escalada post Fiestas tiene varias explicaciones:
En diciembre las cerealeras se comprometieron a liquidar hasta 400 millones de dólares diarios, hoy ese compromiso no se cumple de forma puntual. En tanto que las importadoras en diciembre no llegaron a comprar los dólares que necesitaban para saldar sus deudas por tiempos operativos.
De manera que mientras que las empresas demandaron 2 millones de dólares en diciembre, para el primer mes de 2016 la cifra se duplicó. En tanto que los nuevos importadores se sumaron a la demanda para abonar las compras en el exterior.
Por otro lado, las empresas que quieran enviar parte de sus ganancias a las casas matrices tienen plena libertad para hacerlo. Por lo tanto esos dólares no quedan en el sistema financiero argentino.
El mercado internacional también influye en la cotización de la moneda norteamericana, en este sentido, una suba de las tasas de interés en diciembre pasado en los Estados Unidos, provocó que los inversores abandonaran los mercados emergentes. Esta situación afectó a otras economías como las de Brasil o Chile.
Fuente Mdz