El bajo rendimiento ofensivo de River en los primeros tiempos se ha convertido en una tendencia preocupante. En su primera etapa, los equipos de Marcelo Gallardo se caracterizaban por un ataque arrollador y una gran eficacia goleadora. Sin embargo, en el Torneo Apertura 2025, el equipo muestra un déficit que antes pasaba desapercibido: la escasa cantidad de goles en los primeros 45 minutos.
Este problema no es nuevo, sino una prolongación del tramo final del 2024. Desde la victoria por 4-0 ante Rosario Central en diciembre, donde Pablo Solari anotó justo antes del descanso, River no ha vuelto a marcar en la primera mitad de un partido. La sequía comenzó contra Racing en la última fecha de la Liga Profesional y, hasta la jornada seis del Apertura, sigue sin romperse.
El último encuentro, en el que venció a Lanús, es una muestra de esta dificultad. Aunque el equipo logró llevarse los tres puntos, el único gol del partido, convertido por Miguel Ángel Borja, llegó en los minutos finales.
Comparando con versiones anteriores de River bajo el mando de Gallardo, el contraste es notorio. En el Torneo Transición 2014, su equipo anotó 15 goles en las primeras seis fechas, mientras que en la Liga Profesional 2021, torneo que luego conquistó, marcó 12 en el mismo lapso. En la actualidad, con apenas cinco tantos en seis partidos, la producción ofensiva ha disminuido considerablemente.
A pesar de estar en la cuarta posición de la Zona B con 12 puntos y una diferencia de gol de +4, River se encuentra por debajo de equipos como Rosario Central (10 goles), Independiente (11) y San Lorenzo (6). Incluso Deportivo Riestra (7) y Atlético Tucumán (8), que ocupan posiciones inferiores, han logrado mayor efectividad en ataque.
El problema se arrastra desde el segundo semestre de 2024. Desde la llegada de Gallardo tras la salida de Martín Demichelis, River ha disputado 30 partidos, en 12 de ellos solo marcó un gol y en 10 se fue en blanco. Además, en lo que va del Apertura, todavía no ha logrado anotar más de dos tantos en un mismo encuentro.
El próximo duelo ante San Martín de San Juan, un equipo recién ascendido que aún no ha logrado ganar en la Primera División, podría representar una oportunidad para que el Millonario rompa la sequía en los primeros tiempos y recupere confianza en el área rival.
Fuente: TyC Sports