Después de haber perdido sus dos últimos partidos, San Martín tenía la posibilidad de cortar la mala racha de local frente a un humilde Club Mitre de Santiago del Estero, pero no pudo y empató sin goles dejando una pobre imagen que hizo estallar a los hinchas al final del encuentro.
Una lluvia de silbidos bajaron desde todas las tribunas al igual que los insultos de varios fanáticos que se agolparon en el alambrado que separa a los jugadores con los espectadores. También hubo un mensaje claro de la hinchada contra el hasta ese momento entrenador Alfredo Grelak, a quien le pedían la renuncia. Minutos más tarde, la dirigencia confirmaría su salida.
Para el Verdinegro, este encuentro de la fecha 18 de la Primera Nacional resultaba crucial para prenderse a la pelea de volver a la elite del fútbol nacional. La vez anterior que había sido anfitrión en Pueblo Viejo había caído por la mínima con Belgrano, cuando volvía a la actividad tras la pretemporada y a la siguiente jornada sufría una goleada por 5 a 3 frente a Estudiantes. La tercera no fue la vencida para el de Concepción que empató 0 a 0.
"No se puede jugar tan mal", dijeron desde la trasmisión de radio La Voz, mientras asistían y relataban el juego. "Es preocupante, desesperante el despliegue. En el segundo tiempo se lo vio desdibujado y a los jugadores sin actitud", advirtieron los especialistas radiales.