Estuvo siempre en instancias finales. En la primera mitad del año logró meterse en semifinales, ahora con un equipo para jugarle a cualquiera de igual a igual lo hizo. Es el campeón del fútbol provincial que le ganó a un plantel de una categoría superior. Venció a Desamparados por 1 a 0.
Aún no se terminaron de acomodar en le fondo del puyutano cuando Pedro Terrero sacó una bomba que venció las manos de Emmanuel Guirado. El reloj marcó tres minutos de partido. El festejo de Atenas hizo explotar al Bicentenario. El primer tiempo tuvo a un Desamparados que intentó buscarlo, pero que se topó con un equipo armado y con muchas ganas de gloria que no se guardó nada. Por eso Guirado se hizo figura hasta que se fueron al descanso.
En el segundo tiempo la lluvia jugó un papel preponderante.
En este pasaje de partido, El Víbora sacó chapa e intentó llevar peligro al arco de Cejas. Las modificaciones le dieron protagonismo al verde y blanco pero no efectividad, inclusive tuvo un gol de García que no valió porque Ariel Sánchez estuvo en posición adelantada. El Puyutano no pudo siquiera llevarle peligro al arco de Cejas.
Es que se topó con el amor propio de Atenas y sus jugadores para defender la diferencia de un gol que logró en el amanecer del partido. Desamparados buscó alternativas con Prieto y Sánchez que no pudieron batir la defensa férrea de Cristian Villegas y Moreno, además el despliegue de siempre de Castro, junto a Safar hicieron lo imposible para que el cero se mantenga en su arco.
El árbitro Fernández dio cinco más después de los 45 reglamentarios, el Mirasol no podía más y reventó cuanta pelota llegó cerca del área grande del arquero Cejas.
El silbato final desató la alegría del pueblo pocitano que sin importar la lluvia que siguió cayendo copó el Bicentenario con el grito de campeón, merecido de este año en el fútbol local por primera vez.