Uno de los pilotos más querido por los argentinos y sin duda una de las leyendas del rally mundial, Sebastian Loeb, ganó la segunda etapa en autos, la primera cuyo resultado influirá en la general, en su debut en el Dakar. Segundo llegó Stéphane Peterhansel, su compañero del equipo Peugeot, escudería que este año pretende quedarse con todo.
El primer argentino en la clasificación fue Emiliano Spartaro, quien conduce una Duster preparada íntegramente en argentina. El piloto del TC 2000 tiene como objetivo para la edición 2016 del rally más duro del mundo quedar entre los 10 primeros y en la segunda etapa logró un primer paso hacia ese objetivo: terminó en el puesto 11. Quedó a sólo 5 minutos de Loeb y 3 lugares por encima de uno de los grandes del Dakar como es Carlos Sainz.