Tras años de verse abandonada y descolorida, la rotonda de Libertador y Rastreador Calívar pasó a tener una nueva vida, renovada y con aguas danzantes que le dan una estética fresca y moderna a ese rincón simbólico de los sanjuaninos.
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SUSCRIBITETras años de verse abandonada y descolorida, la rotonda de Libertador y Rastreador Calívar pasó a tener una nueva vida, renovada y con aguas danzantes que le dan una estética fresca y moderna a ese rincón simbólico de los sanjuaninos.
La fuente es la estrella de la rotonda que, ubicada frente al edificio municipal, es paso obligado para los que van a visitar los diques y otros atractivos hacia el Oeste de la provincia.
Con una capacidad de 50 mil litros, sus 10 chorros de agua que arman diferentes figuras ensalzadas con iluminación LED de colores y generan un espectáculo visual que engalana la esquina de día y de noche. El agua cae en cascada hacia un piso especial que la filtra y la reutiliza sin desperdicio.
Esta obra la inauguró el intendente Fabián Martín junto al Parque Sarmiento, que se construyó enfrente, donde antes funcionaba una empresa de colectivos, dándole una cara totalmente modernizada a la emblemática zona.
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