Tremendo susto es el que se pegó el profesor Miguel Domeneghini cuando se encontraba en una de las aulas de la Escuela de Música que funciona en calle Félix Aguilar. Según contó el docente, parte del techo se desprendió y por poco no ocurrió una tragedia.
"Se me cayó un pedazo de techo cuando estaba firmando una carpeta. Se escuché un ruido tremendo y se levantó una polvareda muy grande. Alcancé a esquivar los pedazos de casualidad. No lo podía creer", contó Domeneghini.
El profesor contó que quedó envuelto en polvo producto del yeso que cayó del techo. "Fue más que nada un susto. De a poquito nos vamos acostumbrando a trabajar en un ambiente realmente tóxico. Por suerte el yeso no cayó en mi cabeza. Pero esto es parte de la situación que vive este viejo y arruinado edificio, donde trabajamos desde hace 50 años", expresó.
La Escuela de Música cuenta con 300 estudiantes universitarios, 670 del pre universitario y 160 docentes. A lo largo del año se realizaron diferentes manifestaciones para reclamar por el nuevo edificio, también por las malas condiciones de las aulas que tienen de techo de telgopor en la escuela de calle Félix Aguilar y también con el cursado de algunas clases que se dictan en los camarines del Auditorio Juan Victoria.