"Estoy seguro que en enero o febrero vamos a estar
turbinando”, dijo el gobernador José Luis Gioja en conversación con el ministro
de Planificación Julio De Vido. La frase del primer mandatario se basa en las
intensas nevadas que se registraron en la Cordillera, las que hacen esperanzar
a los sanjuaninos de terminar con este ciclo de sequía que no permitió ni
siquiera llenar los diques. La expectativa en el gobierno es que a principios
de año el dique Punta Negra pueda comenzar a generar energía, que tiene una
capacidad de generación de 65 megas.
Las obras principales que componen el aprovechamiento
hidroenergético Punta Negra son: el túnel de desvío, la presa, el vertedero y
canal de descarga, la toma de embalse y el túnel de aducción a turbinas, la
central de generación –casa de máquinas- y la estación transformadora y líneas
de transmisión.
La altura máxima de la presa, que es de grava compactada con
pantallas impermeables de hormigón armado, es de 115 metros, siendo esta la
parte más alta de la obra. El vertedero tiene una longitud de 90 metros y el
canal de descarga de 230 metros. El volumen de embalse de 500 millones de
metros cúbicos. Respecto de la central,
el túnel de aducción tiene 350 metros de longitud y un diámetro de 5 metros. El
salto es de 85 metros y tiene dos turbinas traídas de Rusia, como en Caracoles.
Gracias a Punta Negra se podrán regar 12.000 hectáreas más
en la Provincia. La obra se inició en el 2009 y llegó a necesitar la mano de
obra de 1370 empleados, que poco a poco están siendo derivados a la
construcción de El Horcajo.