El viento Zonda sin duda fue el gran protagonista del fin de semana. Las fuertes ráfagas se hicieron sentir en varios puntos de la provincia, donde personal de bomberos de la Policía de San Juan tuvo que intervenir no solo para sofocar distintos focos de incendio forestales, sino también ante la caída de ramas de gran porte, producto del viento.
Conforme a lo señalado por el jefe de Bomberos de la Policía, comisario Armando Ruarte, entre el sábado y el domingo intervinieron todos los cuarteles de la provincia en un total de 41 incendios forestales. 19 sucedieron el sábado, mientras que el domingo se tuvo que trabajar en 22 focos. Afortunadamente no se registraron llamas de otro tipo.
“Los incendios no fueron de gran envergadura. La gran mayoría de ellos fueron pequeños, esto debe a ser a que la vegetación está verde y lo seco se quemó con anterioridad”, señala Ruarte.
La mayoría de los focos activos registraron en Rawson, en la zona de Médano de Oro. También se tuvo que trabajar con gran cantidad de personal en las Sierras de Ullum, donde las llamas alertaron a la población debido a las dimensiones que se podían apreciar desde lejos.
Sobre este último hecho, Ruarte aseguró que, durante la mañana personal de bomberos acompañados por el director de Protección Civil, Carlos Heredia, sobrevuelan la zona para asegurarse que las llamas se hayan apagado en su totalidad. “El vuelo es para ver si quedó algún foco activo y si se puede ingresar a la zona, ver por dónde. A simple vista, no se detectan focos activos”, indicó el jefe de Bomberos.
Pero el trabajo no solo estuvo enfocado en la extinción de diversos incendios, ya que además personal de bomberos trabajaron durante el fin de semana en diversas intervenciones ante caída de árboles y ramas de gran porte que fueron colocadas a las orillas de las distintas calles donde se encontraban, para que personal municipal se encargara luego del trozado y levantamiento de las ramas.
“Se ha trabajado bastante, pero menos que en otros incendios. Solo Ullum demandó más persona, pero no se llevó a cabo una labor operativa de gran magnitud porque la zona es inhóspita, no se podía acceder y no había riesgo de vida humana como animal, lo que no ameritaba que arriesgáramos la vida de nuestro personal para intervenir”, indicó el jefe Ruarte, quien estuvo a cargo de los trabajos que realizaron todos los cuarteles en la provincia durante el fin de semana.