El miércoles, el dos veces gobernador de San Juan, Jorge Alberto Escobar, participó de Off the record, el streaming de Política de Tiempo. El empresario recordó la campaña electoral que lo catapultó al éxito con tan sólo 38 años en 1991. Un combo que ahora es un clásico de la política y que, en ese momento, fue revelador. ¿La fórmula? Fútbol, doble beso y un jinglazo. Todo barnizado por la amistad con Carlos Saúl Menem.
Escobar contó que la campaña "estuvo diseñada en los términos de lo que uno hacía en la vida. Y lo que yo hacía en la vida era vender autos. Era consencionario de automóviles, era empresario. Cada que me presentaban, decían que era el consecionario Ford en San Juan y la gente solamente murmuraba, hasta que un día alguien me presentó como presidente del Club San Martín y la gente se sorprendió".
En ese momento, el entonces candidato del peronismo apuntó que ahí estaba la clave. "La imagen se construye desde la popularidad. Yo era sapo de otro pozo, pero el tema deportivo es un tema global que involucra a todos. Las propagandas que se pasaban en la tele llevaban un pedacito de mi querido San Martín, de los jugadores. Mi viejo fue presidente, mi abuelo materno también. La gente vio lo de San Martín y funcionó. Por eso me reía cuando Macri hizo la campaña de jefe de Gobierno con Boca. Esto ya lo vi, lo viví. El deporte es pasión de multitudes", rememoró.
Embed - Tiempo de San Juan on Instagram: "Los tres elementos fundamentales de la campaña a gobernador de Jorge Escobar El exgobernador participó de Off the record, el streaming de Política de Tiempo. Contó cuáles fueron las piedras angulares del triunfo en 1991. Escobar reveló que la presidencia del Club Atlético San Martín fue uno de los pilares sobre los que construyó popularidad. Además, hubo dos elementos clave: las caminatas y el jingle. Conducción: @ortizfer2 @riveros.oliva Producción: @mflorgarcia1 Más info en @tiempodesanjuan #offtherecord #tiempotv #tiempodesanjuan"
Otro de los factores de la victoria fue la caminata. "Caminamos mucho. No existían las redes sociales ni el celular. El celular era un zapato que parecía el de Súper agente 86. Había que caminar porque la cuestión presencial es irremplazable", dijo.
En ese sentido, Escobar resaltó que "si hoy me dijeran que tengo que armar una campaña, se haría desde el punto de vista de Facebook, Twitter, Instagram, pero no eliminaría la caminata porque la mano estrecha, el doble beso al ama de casa, que te espera en la puerta con la sinceridad de una bandejita con un poquito de licor de anís en una bandejita cuando hacía frío. Eran campañas muy esforzadas. Al día de hoy que la gente se acerca y recuerda las charlas, tiene fotos".
El tercer pilar de la campaña a la Gobernación fue el jingle que "fue una cosa increíble. Lo hicieron Los Wawancó con una letra del Flaco Dolina, que era un genio. Cuando lo hicieron, pareciera que lloraban cuando lo cantaban. A mí me bajoneaba. Pero le metieron como 78 revoluciones, le metieron power y arrancamos con un jingle mucho más movidito. Además, yo tenía 38 años. Cuando estabamos filmando, en un momento hice una seña y dije vamos a ganar".