El proyecto cosechó 39 votos a favor del oficialismo, la UCR, el Pro y bloques provinciales. Mientras que los 30 votos en contra fueron de Unión por la Patria.
Con la intención de poder implementar la boleta única de papel en las elecciones del año que viene, el Gobierno envió funcionarios semanas atrás a un nuevo plenario de comisiones y luego difundió entre los bloques aliados un nuevo borrador con modificaciones al dictamen.
Entre los cambios más destacados se quitó el casillero en blanco con la opción de votar lista completa, lo que había sido uno de los mayores reclamos de partidos provinciales. Además, se establece que las elecciones PASO se adelantarían a la primera semana de agosto y, con ello, se correrían otros plazos del cronograma electoral, como el inicio de la campaña, que se iniciaría 60 días antes y no 50, como actualmente, en pos de que den los tiempos para su impresión.
La media sanción se había votado en junio de 2022 y en febrero próximo se caerá si no se trata. El proyecto apunta a un rotundo cambio en la herramienta de sufragio que se utiliza a nivel nacional, basado en la experiencia que ya tienen otras provincias donde se aplica la BUP.
Voces a favor y en contra
Una vez iniciado el debate del proyecto de implementación de la Boleta Única de Papel, el senador entrerriano Edgardo Kueider, en el rol de miembro informante, defendió el dictamen propuesto y les solicitó a los presentes que se expidan en favor del texto: “En lo representativo, este proyecto apunta a fortalecer la elección de nuestros representantes”.
La intervención del legislador de Unidad Federal duró poco más de 30 minutos y remarcó en varias oportunidades que “la Boleta Única aporta a consolidar el sistema democrático de la República Argentina”. Además, se refirió a la modalidad tradicional comparándola con el sistema que se busca aprobar: “Todos podrán ser elegidos con el máximo criterio de equidad y esto garantiza que en el cuarto oscuro esté toda la oferta electoral”. “No hay chance de que ninguna oferta no esté presente”, deslizó.
En un momento de su intervención en el recinto sacó un modelo de la boleta y explicó que habrá una “misma porción y mismo espacio para ser identificado por el elector”. Remarcó el ahorro económico por los costos de la implementación y afirmó que “es un sistema adoptado por la mayoría de las naciones del mundo y se usa por el 79% de los países”.
Referido a las ventajas sobre el elector, llamó a la BUP como un sistema “fácil, ágil y sencillo”. Luego, recordó el tratamiento del proyecto en la Cámara de Diputados -la media sanción se giró al Senado el 8 de junio del 2022-, y alertó que “recién” se haya vuelto a tratar en enero del 2024.
“Esto se define en un ámbito político como es el Congreso. Allí empiezan a sopesarse intereses de partidos políticos que tienen que ver con la oportunidad sobre ‘cuando me conviene o cuando no me conviene’, y por eso se traba”, mencionó Kueider en alusión al anterior oficialismo por no avanzar con la iniciativa. “Nuestro objetivo es fortalecer el sistema democrático y esto es un acontecimiento histórico”, remarcó.
Para terminar su alocución de más de media hora, el senador de Unidad Federal afirmó que “Argentina dejaría de formar parte de ese 20%”, reiteró que “no podemos dejar pasar esta oportunidad”, y le mandó un mensaje al Poder Ejecutivo Nacional: “Son las autoridades nacionales quienes deben ejecutar esto porque es una demanda de los senadores provinciales, no veo desventaja y veo aportes en el fortalecimiento democrático”.
A continuación, por el dictamen de minoría disertó la senadora de Juntos Somos Río Negro Mónica Silva quien recordó que el tema viene siendo tratado desde enero y comentó que la propuesta de modificación a la media sanción de Diputados recaía en el aspecto de la elaboración que sea una boleta única por categorías –presidente y vice; senadores, diputados- para las elecciones nacionales.
“A la propuesta de dividir en tres las categorías, sumamos la idea de que los partidos provinciales nos veíamos perjudicados con la existencia en el modelo de la boleta de Córdoba de un recuadro en blanco para colocar una tilde de boleta completa. Por eso pedimos que ese recuadro no existiera”, informó Silva y precisó que la media sanción de Diputados: “Tenía diferentes aspectos que no estaban del todo bien redactados o claros o algunos contenían errores”. En esa línea, la rionegrina precisó que todas esas correcciones están saldadas en su proyecto de minoría que cuenta con un “número importante de firmas”.
La senadora de JSRN señaló que se han llevado a cabo “una cantidad importante de conversaciones, aproximaciones, análisis de puntos de vistas en los que pudimos analizar otras posibilidades que no habíamos tenido presente”.
“Estas ideas tienen un arraigo y potencia en distintas organizaciones de la comunidad y de la ciudadanía que está pidiendo que sea esta la nueva modalidad en la que abordemos las elecciones nacionales. Escuchamos a las organizaciones y en post de atender ese reclamo de la ciudadanía pensamos en la posibilidad de que confluyeran los proyectos en uno que sea BUP, pero que no exista la posibilidad de que haya partidos que se perjudiquen en la existencia misma de la boleta, sino que sea equitativa la posibilidad para todos los sectores”, expresó.
Silva sostuvo que las modificaciones: “Contienen lo mejor de cada uno de los dos dictámenes que teníamos a la vista, lo mejor de la media sanción y del dictamen de minoría”. “El proyecto que tenemos en tratamiento con modificaciones producto de estas conversaciones es el que deberíamos aprobar para que las próximas elecciones nacionales tenga esta aspiración de la ciudadanía por todos los beneficios que ya señaló Kueider”, afirmó y ejemplificó que en su provincia significaría un ahorro de 30 millones de pesos en sobres.
La senadora rionegrina resaltó que la BUP es “sencilla y manejable” y puso como ejemplo la propuesta de la provincia de Mendoza donde ya rige el sistema: “Es una propuesta en la que los partidos, las agrupaciones políticas intervinientes, están en el eje cartesiano de lo que e serían las filas. En este eje se encuentran las agrupaciones políticas y en el eje de las columnas estaría claramente este expresadas las categorías que se votan en cada elección nacional”.
Así, mostró un modelo de ejemplo de lo que serían las elecciones del 2025: “Es una boleta muy sencilla de manipular, no es una boleta de un tamaño que no se pueda trabajar tranquilamente los recuadros en donde hay que colocar la tilde. Son visibles y de un tamaño adecuado y las candidaturas se expresarían de quienes son titulares con fotos de dos personas de las dos primeras personas de cada lista”.
“La boleta quedaría conformada con mucha legibilidad y con una letra correcta y adecuada para una fácil lectura. También permite que al doblarla evitemos el uso del sobre y en el dorso dice con absoluta claridad cómo hay que ir tapando la elección de candidatos y dejar a la vista solamente el distrito en el que la boleta se usa solamente. El distrito queda a la vista en la boleta y en el reverso queda a la vista la fecha de la elección”, explicó.
Silva consideró que “esto requiere de una preparación o diferentes cursos que la ciudadanía esté atenta y enterada de qué se trata esto, pero es absolutamente posible correcta y sencilla de manejar. Al no contener en este proyecto una casilla para colocar una tilde de boleta completa queda salvada la desigualdad a la que hubiéramos estado sometidos los partidos provinciales”, y manifestó su apoyo a adoptar un modelo como el mendocino que “ordena perfectamente la escritura. La modificación del código electoral proponiendo esta boleta única papel cumple con el clamor ciudadano de que esta es la mejor forma, la más democrática, la más igualitaria, la que evita la necesidad de tener situaciones en las que hay agrupaciones que no tienen boleta”.
Otra postura a favor del proyecto fue la del senador radical Maximiliano Abad, quien destacó que este sistema “es esencial para el fortalecimiento de la democracia, mejora la participación ciudadana y recupera la confianza de los ciudadanos en las instituciones”. En otro sentido, sostuvo que “el avance es muy relevante, más equitativa, más simple, más austera, más económica y ambientalmente sustentable, es más transparente y se desaniman el robo de boleta, las cuales son prácticas que sabemos que existen”.
Al igual que varios legisladores destacó su existencia en el 79% de los países del mundo y mencionó que “las experiencias subnacionales lo demuestran”, referido a Córdoba, Santa Fé y Mendoza. Para terminar, enumeró aspectos positivos de este texto: “Se gastan menos recursos económicos porque se hace una boleta única, se reduce la tinta y la impresión de boletas papel y debemos cuidar el medio ambiente con hechos concretos”. “Es un avance trascendental en el plano constitucional”, reiteró.
Por su parte, el recientemente eyectado del oficialismo Francisco Paoltroni del monobloque Libertad y Progreso expresó: “Es imposible no estar de acuerdo con este proyecto de BUP, pero fíjese las diferencias que se empiezan a crear. Por un lado, queriendo evolucionar con esta herramienta tan postergada y, por otro lado, en las provincias que estamos en la Edad de Piedra”.
El senador puso como ejemplo su provincia y criticó que “viene muy atrasada con las formas democráticas porque se usa la Ley de Lemas”, y celebró que “esto es un pasito que estamos dando adelante con la boleta única a nivel nacional. Los argentinos están esperando para que terminemos con las trampas de una vez por todas que se llama reelección indefinida para todos los niveles”.
Por el bloque Frente Pro, la senadora porteña Guadalupe Tagliaferri señaló que “nuestro sistema electoral es bueno, pero siempre podemos mejorar los procesos”. En su breve intervención, remarcó su apoyo explícito al proyecto y definió que “tenemos una gran oportunidad porque esto es una demanda de la ciudadanía”.
Enumeró, además, una serie de aspectos positivos que esta ley podría facilitar: “Muchas organizaciones de la sociedad civil vienen manifestándose hace muchos años de las ventajas de tener BUP como facilitar al elector la decisión, a los partidos que son chicos, a la labor de los fiscales y al cuidado del medio ambiente”. “No veo nada que atente al sistema argentino, y esto favorece al votante para robustecer y transparentar todo lo que se pueda”, indicó.
Otra cuestión que Tagliaferri destacó fue que “a pesar de que el proyecto volverá con modificaciones a Diputados, en un proceso virtuoso para esta Argentina, tiene consenso”. “En todas las leyes y decretos debemos tener consensos tratando de encontrar el sentido colectivo”, consideró.
Por el espacio de Cambio Federal, el senador salteño Juan Carlos Romero criticó al kirchnerismo por haber postergado el debate y le enrostró que hay un dictamen del 10 de enero que cuenta con firmas de legisladores de la principal bancada opositora que “hoy cambiaron de parecer”.
“Esto que esperamos sancionar tiene grandes contribuciones y mejoras y espero que haya conciencia en Diputados y no haya dilación del tema o bloqueo y que podamos tenerlo el año que viene en las elecciones nacionales”, planteó y sumó que la BUP “asegura la oferta electoral de forma más transparente, se va a evitar el robo de boletas, voto en cadena, se evita la manipulación. Tenemos que tener un sistema que no tenga fragilidad y sea confiable”. También señaló que se ahorra en un 50% del gasto.
El último expositor fue el jefe de bloque libertario, Ezequiel Atauche, quien replicó el accionar de varios senadores y sacó una versión del diseño de la boleta en cuestión. “Sin aprovechar que somos oficialismo seguimos empujando la boleta única de papel porque va a traer más transparencia y más equidad”.