Allanamiento de la Policía Federal en plena madrugada,
clientes adentro de la casa, chicas rescatadas y él, Enrique Olivencia Fredes,
en el lugar de los hechos, siempre. Se trata del hombre que tiene harta a la
Federal porque nada parece ser suficiente para mantenerlo preso.
El pasado 20 de agosto efectivos de la Sección
Crimen Organizado de la Agencia Regional Cuyo de la Policía Federal lo
volvieron a atrapar. Luego de investigar durante más de un año, reventaron su prostíbulo en calle San Luis 295
(E) y rescataron cuatro chicas que "trabajaban” en el lugar. A Fredes se lo
investiga por el delito de trata de personas con fines de explotación sexual
pero no es la primera vez que cae, sino la cuarta, en cuatro años.
"De ese prostíbulo, en ese mismo lugar,
recibimos dos o tres denuncias por mes”, comentó una fuente judicial. De hecho
no es la primera vez que los federales allanan la misma casa.
Fredes cayó en 2012 por primera vez, o por lo menos fue esa la primera vez que su nombre
trascendió a los medios. En esa oportunidad lo acusaban de infringir la Ley de
Profilaxis que es un delito excarcelable por lo que Fredes fue liberado. Pero
no tardó mucho en volver a la cárcel y en febrero de 2013 lo volvieron a meter
preso sospechado de trata de personas. En abril, dos meses después, fue detenido
en un mega operativo que rescató a 57 mujeres, presuntas víctimas de la
explotación sexual.
Ésta fue la primera vez que Fredes fue
procesado y terminó en juicio junto a otras 18 personas sospechadas de formar
parte de una red de trata en San Juan. Sin embargo, el Tribunal Oral Federal entendió
que el sujeto no debía ser juzgado por ese delito y se declaró incompetente. Su
caso pasó a la Justicia Provincial y a pesar de que el fiscal federal, Francisco
Maldonado, apeló la decisión del tribunal, esto aún no ha sido resuelto.
En libertad, Fredes volvió a hacer de las
suyas. La Cámara Gesell a las cuatro
víctimas rescatadas será fundamental para acusar al hombre por trata y que la
investigación no vuelva a caerse, como en las otras tres oportunidades.
Los investigadores aseguran que Fredes zafó
del mega juicio por trata e inmediatamente volvió a administrar su prostíbulo
pero tuvieron que seguirlo durante un año y medio para atraparlo, otra vez, con
las manos en la masa.
"Los vecinos vivían denunciando, todos sabían
que ahí funcionaba un prostíbulo”, relató una fuente policial.
Fredes continúa detenido, investigado por
trata de personas y ahora es el juez federal, Leopoldo Rago Gallo quien tome
una decisión sobre la situación judicial del sospechoso. Si el magistrado se
declara incompetente y baja la calificación, la causa podría saltar al fuero
provincial, una vez más.