Isidro Castillo (39) estaba de servicio, cuando en horas de la tarde le dijo a sus compañeros que "salía a comprar". Subió a su auto, partió hasta Senillosa, Neuquén, y mató a su ex pareja, Lorena Díaz (34). Después, se dio un tiro en la cabeza.
Ayer, luego de agonizar en estado desesperante en el hospital Castro Rendón, falleció pasadas las 11.
Ayer, en horas de la tarde, una comitiva de la fuerza provincial trasladó el cuerpo de Castillo hasta El Cholar, pueblo del norte neuquino donde nació y se crió antes de viajar hasta Neuquén capital para inscribirse en la escuela de cadetes.
La mujer, que estaba contratada por la municipalidad de Senillosa, tenía dos hijos de una relación anterior y estaba sola en la tarde del sábado cuando apareció el efectivo, que hizo el trayecto Plottier-Senillosa en su auto particular.
Hubo una discusión, fuerte y en duros términos, y dos disparos fatales. La mujer recibió el primero y murió al instante en la vivienda de la calle Urquiza 958. Luego, el efectivo apoyó el arma reglamentaria en su sien y descerrajó un tiro que terminaría con sus días unas horas más tarde, pasadas las 11 de la mañana de ayer.
Fuente: MDZ Ol