Al menos cuatro muertos y miles de evacuados dejó hoy el huracán Lawin, que golpeó con fuertes vientos e intensas lluvias el norte de Filipinas.
Dos trabajadores de la construcción murieron en La Trinidad, localidad de la provincia montañosa de Benguet, al quedar sepultados por una avalancha de tierra, mientras que otras dos personas se ahogaron en la provincia Ifugao, según el diario Inquirer.
El fenómeno meteorológico perdió fuerza tras tocar tierra en las provincias de Isabella y Cagayan, en la isla de Luzón, donde ayer fue decretada la señal 5 de alerta, la más elevada.
Lawin, de 700 kilómetros de diámetro, golpeó con vientos sostenidos de 185 kilómetros por hora y ráfagas de 230 el norte de Luzón, donde la alerta fue reducida a señal 3 en diez provincias, según el servicio meteorológico filipino Pagasa.
El organismo, ubicó el ojo del huracán fuera del territorio y prevé que por la tarde haya abandonado la zona de influencia filipina a medida que avanza hacia China.
Unas 6.000 personas fueron evacuadas en Isabella, donde el viento y las intensas lluvias provocaron el corte del suministro eléctrico y la caída de árboles, mientras varias aldeas quedaron aisladas por crecidas de aguas, según la televisión GMA.
También hubo cortes de electricidad y evacuaciones en Batanes, Baguio e Ilocos Sur.
El huracán Lawin pasó por la misma zona de Filipinas que el fin de semana se vio afectada por el huracán Sarika, que causó al menos dos muertos.
(Fuente: Crónica)