La aparición de varios perros con pelaje azul en los alrededores de Chernobyl despertó sorpresa y preocupación entre los investigadores que trabajan en la zona de exclusión. Integrantes de la organización Dogs of Chernobyl, que se dedica al rescate y control sanitario de los animales que habitan el área contaminada, reportaron haber visto a tres ejemplares de ese color mientras realizaban una campaña de captura y esterilización.
Según contaron los voluntarios, los animales se encontraban activos, alertas y aparentemente sanos. Sin embargo, aún no pudieron ser capturados para realizar estudios que permitan determinar la causa del extraño tono de su pelaje. Las imágenes registradas en las inmediaciones de la abandonada ciudad de Prípiat se viralizaron rápidamente en redes sociales, alimentando todo tipo de teorías.
“Probablemente estén en contacto con alguna sustancia química, aunque todavía no sabemos con certeza qué ocurre”, explicó la ONG en un comunicado. Los habitantes del lugar también expresaron su asombro ante el fenómeno, del que por ahora no se tienen certezas.
Expertos consultados por el portal Science Alert consideran poco probable que el color tenga relación con la radiación, y apuntan más bien a una posible exposición a compuestos industriales, como sucedió en 2021 en la ciudad rusa de Dzerzhinsk, donde varios perros quedaron teñidos de azul tras rodar en polvo de sulfato de cobre.
Mientras tanto, los investigadores de Dogs of Chernobyl intentan capturar a los animales para obtener muestras de pelo y piel que serán analizadas en laboratorios ucranianos. Solo entonces se podrá saber si el cambio de color afecta su salud o si se trata de una alteración meramente superficial.
La organización, fundada en 2017, asiste cada año a unos 700 perros que viven dentro del perímetro de exclusión, descendientes de las mascotas abandonadas durante la evacuación tras el desastre nuclear de 1986, uno de los episodios más trágicos en la historia moderna.