La reacción a un simple informe de research publicado el 13 de diciembre pasado, pero difundido este lunes por una agencia internacional, algo que circula habitualmente en el mercado, es sorprendente. Al momento de redactarse esta nota el american depositary receipt (ADR, como se llama a las acciones de empresas extranjeras que cotizan en la Bolsa de Nueva York) de Grupo Supervielle subía algo menos del 17 por ciento. Es una suba de su valor en dólares, tal como se negocia en Wall Street. Los cuatro bancos argentinos que cotizan en mercado más importante del planeta se disparaban también.
La disparada era recibida con incredulidad por muchos traders avezados que hablaron con este medio. Pero no había quejas: “en Argentina, al final, es cuestión de seguir los flujos”, dijo un operador.
Es que el rally de los activos argentinos durante este último año estuvo empujado, más que nada, por inversores locales o inversores extranjeros muy especializados. Tras el colapso de 2018, los fondos grandes se tomaron su tiempo antes de volver a apostar por el país. Entonces, una de las principales novedades del envío de Morgan Stanley es que el mítico banco volvió a cubrir con sus informes de research al país.
“Ese es un dato no menor”, dijo Maximiliano Donzelli de IOL InvertirOnline. El reinicio de la cobertura por parte del gigante de Wall Street genera expectativas de que fondos real money, fondos de pensiones y otros vuelvan a poner dinero en activos locales. Dicho más simple: que empiecen a ingresar inversiones del exterior en acciones argentinas.
“En ese sentido ellos son muy optimistas con Argentina y principalmente con el sector bancario (...) Creemos que para los inversores es momento un poco de tener mucho cuidado con estas noticias que disparan mucho a los mercados. No entrar en estos momentos, ser un poquito más cauto”, agregó el anaa.
Más allá de la eufórica reacción de los inversores locales y extranjeros, el reporte que disparó las subas es un detallado análisis de Jorge Kuri, Jorge Echevarria, Andrew Geraghty y Nicole Alcalay que, principalmente, se basa en las expectativas de estabilización económica y la baja penetración de los préstamos en el país para generar una explosión del crédito de aquí a 2027.
Según el análisis de Morgan Stanley, Argentina podría convertirse en el mercado bancario de mayor crecimiento en América Latina, impulsado por una combinación de factores macroeconómicos y estructurales. En primer lugar, el país enfrenta una baja penetración bancaria, con un ratio de préstamos al PBI del 12%, el más bajo de la región. Esto contrasta con su posición como la tercera economía más grande de América Latina, lo que refleja un potencial significativo para expandir el acceso al crédito y servicios financieros.
“Un entorno económico más constructivo podría convertir a Argentina en el mercado bancario de mayor crecimiento en la región”, señala el reporte. “Proyectamos un crecimiento de préstamos del 35% en términos reales durante los próximos tres años, el más alto de toda América Latina”, agregó en otro pasaje el banco de inversión estadounidense.
Además, los bancos argentinos cuentan con ventajas estructurales clave que pueden acelerar este proceso de bancarización. Entre ellas, destacan una amplia clase media, con mayor poder adquisitivo que en otras naciones de la región, y un acceso masivo a los servicios bancarios ya establecido. Aunque la utilización de créditos sigue siendo baja, este segmento poblacional está bien posicionado para liderar un aumento en el uso de productos financieros.
Por otro lado, los balances de las instituciones financieras argentinas se encuentran en una posición sólida, con niveles altos de capitalización y bajo apalancamiento. Esto reduce los riesgos y ofrece una base más estable para asumir el crecimiento proyectado.
“Las acciones de bancos argentinos tuvieron un impresionante repunte de aproximadamente 250% en los últimos 12 meses, pero aún cotizan con descuento frente a sus pares de la región”, añadió otro pasaje del informe.
En el informe, Morgan Stanley analiza en detalle cuatro de las principales instituciones financieras del país: BBVA Argentina, Banco Macro, Grupo Financiero Galicia y Grupo Supervielle. A continuación, se destacan las estimaciones de precio objetivo y los fundamentos detrás de las recomendaciones.
BBVA Argentina
El precio objetivo de Morgan Stanley para esta acción se sitúa en 27 dólares por ADR para diciembre de 2025, lo que implica un potencial de revalorización del 55% respecto a su valor actual de 17,40 dólares. La entidad resalta que BBVA tiene un atractivo perfil de valorización, ya que se encuentra cotizando con descuentos frente a sus pares regionales, pese a sus sólidas perspectivas de expansión en el segmento de préstamos al consumo y comerciales. Este banco también se beneficiaría de una gradual mejora en su rentabilidad, con un ROE estimado del 14,6% en 2025.
Banco Macro
Banco Macro aparece como una de las opciones más consolidadas del sector, con un precio objetivo fijado en 125 dólares por ADR, representando un alza proyectada del 40%. Según Morgan Stanley, Macro destaca por su base diversificada de clientes y su enfoque en el crecimiento de préstamos, que se estima en un 49% real para 2025. Además, se proyecta un ROE en alza que alcanzaría el 17% en 2025. A pesar de tener el menor upside entre los bancos analizados, su sólida posición financiera y su baja exposición a riesgos lo hacen una alternativa atractiva.
Grupo Financiero Galicia
Para Galicia, Morgan Stanley prevé un precio objetivo de 92 dólares por ADR, lo que equivale a un incremento potencial del 49%. Este banco se posiciona como líder en el sistema financiero argentino, con un fuerte enfoque en servicios financieros y seguros. Galicia se beneficia de un aumento esperado en ingresos por comisiones y de una mejora notable en la rentabilidad, con un ROE proyectado de 25,5% en 2025. La institución combina su liderazgo en banca minorista y corporativa con perspectivas de crecimiento acelerado.
Grupo Supervielle
Supervielle, aunque más pequeño y volátil que los demás, tiene un atractivo precio objetivo de 19 dólares por ADR, con un potencial de revalorización del 44%. Morgan Stanley resalta su estrategia orientada a expandir su base de préstamos minoristas y al consumo. Aunque enfrenta mayores desafíos por su tamaño, sus menores niveles de valuación frente a los grandes bancos representan una oportunidad de inversión.
Morgan Stanley basa sus proyecciones optimistas en un conjunto de indicadores macroeconómicos que muestran signos de estabilización en Argentina. Entre ellos, destaca la caída proyectada de la inflación, desde un 220% en 2024 hasta un 41% en 2025, y la reducción de las tasas de interés del 35% al 25% durante el mismo periodo. Además, el PBI del país podría expandirse un 4,4% en 2025, tras una contracción del 3,6% en 2024.
El riesgo país también presenta una mejora significativa, habiendo alcanzado recientemente los 796 puntos básicos, su nivel más bajo en cinco años. Esto, combinado con las reformas económicas en marcha, fomenta un mayor interés de los inversores internacionales.
A pesar de las proyecciones alentadoras, el informe no pasa por alto los riesgos asociados a la inversión en acciones bancarias argentinas. Los factores más relevantes incluyen:
- Incertidumbre política: Una pérdida de apoyo al plan de estabilización del gobierno podría generar volatilidad en las políticas económicas, especialmente ante las elecciones legislativas de 2025.
- Dependencia de precios de commodities: Una caída en los precios internacionales o cosechas débiles podrían afectar las bases macroeconómicas de la recuperación.
- Competencia creciente: El mercado podría enfrentar mayor presión competitiva por parte de bancos públicos y fintechs, lo que podría limitar la expansión de los márgenes de los bancos tradicionales.
Además, la exposición al contexto macroeconómico volátil de Argentina implica que los inversores deben estar preparados para enfrentar oscilaciones significativas en los precios de las acciones. Aunque el informe enfatiza el potencial a mediano plazo, advierte sobre la posibilidad de fluctuaciones importantes en el corto plazo.
FUENTE: Infobae