Empezó hace 27 años con una firma unilateral en Rawson, en el camino sumó a su compañera de vida y armó una consultora en temas eléctricos, pero dos décadas después se sumaron los hijos y mutó a una pyme familiar, una hormigonera que hoy revoluciona a San Juan.
Con una millonaria inversión la firma H3 inauguró en Chimbas su tercera planta, que se suma a la que tienen en Iglesia y Calingasta; y cuando culmine la segunda etapa en el 2025 se convertirá en la más importante de Cuyo. Para entonces habrá sumado a 50 empleados a su staff permanente.
Solo los íntimos saben el significado del nombre que hoy une a la familia Monsalvo García en su más exitosa creación: La letra H seguida de un número clasifica la dureza del hormigón en el mundo de la ingeniería, pero junto con el 3 no existe. El grupo lo hizo propio, y a la H le sumó el 3 porque es el número de hijos que los acompañan en la exitosa pyme familiar.
De la electricidad al hormigón
Corría el año 2000 cuando María Isabel García -que fue contadora pese a que la tradición familiar la quería docente- decidió acompañar en el negocio a su marido, el ingeniero electromecánico Sergio Monsalvo. Él continuó con el montaje Industrial, mantenimiento eléctrico y asesoramiento energético, y ella con todo el asesoramiento a sus clientes, las grandes empresas que necesitaban reducir costos energéticos.
En el año 2006 ella le dio un giro copernicano a la empresa, al impulsar el nacimiento de la consultora G y M. Con esfuerzo el matrimonio formó un equipo que llegó a realizar grandes obras como la de iluminar la Ruta Interlagos hasta el dique Punta Negra, o convertirse en subcontratista de Cartellone en la construcción de la Línea de 500 Kv.
Fue cuando lograron una obra bisagra en su vida: Los contrataron para construir 8.4000 metros cuadrados de galpones en la obra de la represa hidroeléctrica Tambolar, a fines del 2015, y decidieron comprar una planta hormigonera. Hoy van por tres.
En el año 2016 montaron la primera planta hormigonera. Al año siguiente sumaron una segunda para poder cumplir con un trabajo delicado: reparar el descargador de fondo dañado del dique Caracoles con 4.500 metros cúbicos de hormigón. Una vez terminado esa segunda planta se instaló en Jáchal durante un año, y luego se la trasladó a Iglesia donde aún permanece para hacer diferentes obras, entre ellas; prestar servicios con hormigón en Seco a la mina de oro Veladero. Otra hormigonera se ubicó en Calingasta desde dónde están suministrando la materia prima para los primeros puentes mineros viales de San Juan que construye la minera Pachón en ese departamento.
La instalación de la hormigonera en Chimbas que fue inaugurada este lunes con una inversión de 3 millones de dólares en un predio de 10 hectáreas y que suma una planta clasificadora más camiones constituyen la primera etapa del proyecto.
Ya está en marcha la segunda etapa que insumirá otros 3 millones de dólares y estará terminada para el 2025 sumando galpones de mantenimiento oficinas comerciales y más equipamiento de camiones. Para el año próximo la planta planea duplicar su producción diaria de hormigón de 500 metros cúbicos.
La clave del éxito
H3 es la marca patentada de la consultora G y M y en la pyme además del matrimonio participan todos los hijos. Agustín (29) el mayor, es el gerente comercial. Cecilia (27) es la gerente de operación del área minera recientemente abierta. Y Mercedes (23) acaba de recibirse de ingeniera en Materiales en la plata y se sumará pronto al negocio. María Isabel es la gerente financiera, y su marido Sergio el gerente técnico.
El secreto del negocio familiar es mantener firme el sentido de pertenencia. "Es una visión única e irrepetible que nos transmitieron nuestros padres", dice Agustín, quien jura que él y sus hermanas conocieron el abecedario del negocio familiar haciendo los deberes de la escuela en el escritorio junto a sus padres. "Considero que hay que abrirles la puerta a los hijos y darle alas", sostiene María al explicar que cada vez les ceden más lugar a sus hijos.
Embed - La empresa familiar sanjuanina que hoy es la hormigonera mas grande de Cuyo
Los planes a futuro
- Con la apertura de su área minera ya cumplió la protocolización y armado de equipos técnicos además de certificaciones de normas ISO que le permitirá ofrecer servicios de hormigón y entrega postventa para obras de infraestructura y mineras.
- Además de los puentes para la minera Glencore que tiene el proyecto Pachón en Calingasta también están entregando premoldeados de hormigón a la empresa Flúor, destinados al camino a la futura mina de Josemaría en Iglesia.
- Para el 2025 la pyme apuesta a profundizar el área de perforaciones, y además ingresar al mercado de capitales para poder continuar expandiéndose fuera de las fronteras de la provincia.