San Martín hizo un trabajo de hormiga para conseguir el ascenso a Primera. Nada fue casualidad y después de cinco largos años, San Juan otra vez está en la máxima categoría del fútbol argentino. Al término del encuentro en el Estadio Julio César Villagra y mientras los flashes de las cámaras apuntaban a los jugadores campeones, Ana estallaba de felicidad: quien es la dama que gestó el ascenso desde la nutrición.
Su nombre es Ana Laura Echegaray y hace 6 años que es la nutricionista del plantel verdinegro. La joven es la única mujer del equipo, que además de cumplir su rol como profesional, es hincha de los colores. Combina pasiones desde el 2018 y el domingo se bañó en oro con el regreso a Primera.
Tras el ascenso en el Gigante de Alberdi, Tiempo de San Juan conversó con la única dama del equipo: piluso verdinegro, remera de Paso a Paso y los ojos empañados de tanta felicidad. La locura por llegar a Primera era mucha, tanto que los periodistas estaban amontonados en la valla para llevarse la palabra de los jugadores. Cuando casi no quedaba nadie en el vestuario, Ana hizo el camino del campeón con la mirada tímida ante la invasión de colegas, y se detuvo con sorpresa ante el llamado de Tiempo, que quería llevarse su palabra tras el trabajo que gestó desde lo invisible y silencioso.
"Esto es una locura. Entré al club en el 2018 cuando estábamos en Primera. Esa temporada también me tocó vivir el descenso y después de 6 años volver a conseguir el ascenso la verdad que es increíble. Es una mezcla de emociones muy bonitas", le dijo a este medio.
"Siempre me tocó trabajar con planteles y cuerpos técnicos que valoran mucho el trabajo desde lo nutricional y siempre han sido muy respetuosos, desde la Comisión Directiva hasta el utilero. En el club tengo también como mi grupo de amigos y por suerte me llevo bien con los jugadores. A veces me cuesta que entiendan que el tema de la nutrición es ese entrenamiento invisible".
Ana trabaja con el equipo hace varios años. Seguramente vio pasar muchos técnicos, procesos y jugadores, que con el tiempo fueron levantando el ancla y mudándose a otros clubes. Sin embargo siempre se acopló a lo nuevo y trabajó en conjunto con el jugador para conseguir los frutos: ¿Cuánto crees que es tuyo este ascenso? "Desde mi parte le aporté el 100 porciento, porque siempre di lo mejor, me preocupé un montón para que siempre tuvieran lo mejor en la suplementación, en la alimentación, en las comidas... y eso para mi es un 100. Me siento como realizada desde lo profesional también".
Más tranquila y poniendo una pausa en el camino que escapaba del Alberdi para ir al colectivo, Ana le confesó a Tiempo cómo vivió la final ante el lobo mendocino.
"Soy hincha de San Martín y sufro los partidos, lo vivo como un hincha. En el primer tiempo lloré y después los nervios, me andaba escondiendo para que no me vean que se me estaban cayendo las lágrimas".
Si bien siempre fue respetuosa con el plantel, ese momento de la gloria fue único: "canté, los cachetee a todos en los goles. Lo sufro y las victorias las vivo mucho más", cerró Anita, la nutri copada de Concepción que laburó desde lo invisible para llevar al Verdinegro al ascenso.