Más rumores generaron un nuevo cortocircuito entre el intendente de 9 de Julio, Daniel Banega, y la presidenta del Concejo Deliberante, Elizabeth Sánchez. Esta vez, operadores del peronismo deslizaron que el jefe comunal evaluó echar a la edil de la Junta Departamental. Sin embargo, fuentes cercanas al comunero negaron cualquier movida y aseguraron que la dirigente es quien fogonea los dichos para tomar protagonismo. Todo sucede justo en plena campaña.
No es la primera vez que el intendente tiene un conflicto con la concejal. Ni bien terminó el 2024, hubo un problema con las vacaciones de Banega. El jefe comunal del uñaquismo tenía previstas sus vacaciones desde el 30 de diciembre hasta el 12 de enero. Pero retornó a la Municipalidad por el choque entre el secretario de Gobierno, Lucio González, y Sánchez.
El enfrentamiento entre el funcionario de mayor confianza de Banega y la titular del Concejo es de vieja data. La mujer cuestionó la posición de privilegio de González al lado del intendente. Durante el 2024, participó de varias reuniones del Partido Justicialista y acusó el destrato que, supuestamente, sufre a diario.
Según fuentes calificadas, las quejas de Sánchez apuntan a que no es tenida en cuenta en las decisiones sobre la vida institucional del municipio y que González ni siquiera vive en el departamento. De hecho, es oriundo de Santa Lucía y compitió dos veces por la intendencia de ese municipio.
El choque de mayor envergadura sucedió cuando Banega hizo efectivas sus vacaciones y firmó el decreto para ser reemplazado de forma interina por Sánchez. Las versiones sobre lo que sucedió varían de acuerdo al interés de cada sector.
Mientras desde el sector de González apuntaron que el decreto estaba listo y que la presidenta del Concejo sólo debía notificarse, desde el entorno de Sánchez aseguraron que nunca fue notificada formalmente. Es más, dijeron que eso puede verse porque el decreto tiene las firmas del intendente y del secretario de Gobierno, pero no la de ella.
En tanto, desde la Municipalidad, alineada con el funcionario de confianza de Banega, afirmaron que el 2 de enero la dirigente llegó y se molestó porque la oficina de la Intendencia estaba cerrada y no la habían puesto al corriente de los asuntos importantes.
En contraposición, una fuente que consultó a Sánchez graficó el conflicto: "Ella y dos concejales más se reunieron con González (el 2 de enero). El vice del Concejo debía asumir la presidencia del Concejo. Pero sólo hay un decreto firmado por Banega y el secretario de Gobierno y no por ella. Es más, Lucio la mandó a su casa y le dijo que espere la caravana de Reyes Magos, así acompaña a los niños nuevejulinos. Es un montón".
Ante el escenario de conflicto, el intendente uñaquista regresó al departamento para asumir nuevamente la conducción municipal y echar por tierra cualquier tipo de escaramuza por el poder. Principalmente porque el siguiente en la línea sucesoria es un orreguista que ingresó por la lista de Emelí Nuñez, Franco Barrionuevo, pero que actualmente colabora con el peronismo en votaciones clave como el Presupuesto.
Ahora, los rumores indicaron que Banega pidió la Carta Orgánica del Partido Justicialista para analizar la desvinculación de Sánchez de la Junta Departamental justicialista. ¿Por qué? Aparentemente, la dirigente no está en la campaña y además continúa obstaculizando el trabajo administrativo del Concejo. Una fuente que tiene contacto permanente con el intendente desmintió cualquier movida para sacar a la edil de la estructura peronista. "Es mentira, quiere protagonismo, pero nadie le dijo nada. Hace meses que insiste, por todos lados anda diciendo eso", manifestó en estricto off the record.
Asimismo, recordó las vacaciones de Banega. De acuerdo a la versión de la fuente, Sánchez "dijo que nadie le aviso siendo que habían cenado (con el intendente) en la casa de ella, la noche anterior".