Un vecino de Rivadavia pidió auxilio al ver que una parte de su casa se quemaba luego de que el cargador de un celular que había quedado enchufado, terminó explotando. Afortunadamente no se registraron víctimas, según indicaron fuentes policiales.
Desde la Comisaría 28va, indicaron que el accidente doméstico se registró durante la noche de ayer domingo, alrededor de las 22, en una vivienda del barrio Foeva.
Un miembro de la familia que vive en el lugar indicó que dejó el aparato enchufado en el dormitorio donde, repentinamente, explotó. De inmediato se generó un incendio.
Hasta el lugar llegó personal de Bomberos que sofocó las llamas. Como consecuencia del hecho se quemaron la cama, el placard y otros efectos de esa habitación y el baño. Debido a que no había ninguna persona en el lugar en el momento de la explosión, nadie resultó herido.