Un violento episodio se registró el pasado martes por la tarde cuando una pareja intentó subir a un colectivo de la línea B de la empresa La Marina sin pagar el pasaje. Ante la negativa del chofer, uno de los involucrados reaccionó arrojando una piedra que terminó dañando una de las ventanillas del vehículo.
El hecho ocurrió alrededor de las 19:20 horas, sobre Avenida Benavidez, a la altura de calle Mendoza. Según se conoció en la audiencia judicial, una mujer y un hombre —identificado luego como Oscar Hernán Oliva— abordaron la unidad aprovechando la detención del colectivo por el semáforo. Al no contar con pasaje, solicitaron ayuda a los pasajeros, y al no recibir respuesta, se dirigieron directamente al conductor pidiéndole que los llevara sin abonar.
El chofer, Paul Federico Villegas, les explicó que no podía trasladarlos sin que pasaran la tarjeta SUBE, e inmediatamente les pidió que descendieran del colectivo. Fue entonces cuando la situación se tornó agresiva: la pareja recogió piedras del suelo y comenzó a amenazar al conductor. “Si arrancás te tiramos piedras y te partimos el colectivo”, le gritaron.
Villegas optó por cerrar la puerta y continuar con el recorrido cuando el semáforo lo permitió. En ese momento, Oliva cumplió su amenaza y arrojó una piedra que impactó y rompió el vidrio de la cuarta ventanilla lateral del lado derecho del colectivo.
Este jueves, el caso fue resuelto mediante juicio abreviado. Oscar Hernán Oliva fue condenado a 15 días de prisión de cumplimiento efectivo por el delito de daño simple, según lo establecido en el artículo 183 del Código Penal. El hecho fue considerado una agresión directa no solo contra el patrimonio de la empresa, sino también contra un trabajador que cumplía con su labor.