Desesperada, Marta Uliarte, una vecina de 90 años de Capital, pedía auxilio desde la ventana de su casa. A su alrededor, las llamas iban avanzando por su cocina y ella estaba atrapada. Fue un vecino quien la oyó y pidió auxilio. Minutos después, en una tarea conjunta entre él, personal policial y de Bomberos, lograron ponerla a salvo.
Todo sucedió anoche, alrededor de las 22:30. Marta cocinaba en su casa del barrio Universitario cuando, en un descuido, comenzó el incendio. Asustada, buscó salir, pero las llamas tapaban la única puerta al exterior. Entonces, decidió asomarse a la ventana.
“Mi abuela pedía auxilio por una ventana porque había quedado encerrada ya que el foco del fuego estaba en la salida de la casa”, relató Darío Quiroga, nieto de la mujer.
Ese fue el momento en que la escuchó Roberto Tello, su vecino, quien al advertir lo que sucedía dio aviso al 911. Mientras tanto, logró romper una ventana, con el fin de que ingresara más aire a la vivienda que le permitiera respirar a Marta y, al mismo tiempo, tranquilizarla hasta el arribo de la ayuda.
Finalmente, en un esfuerzo mancomunado, el personal de Bomberos y de la Comisaría Leiva, integrado por el oficial ayudante Gabriel Riveros, el cabo primero Daniel Sanchez, el cabo Roberto Tejada y los agentes Jazmín Pacha y Braian Molina; logró ingresar a la vivienda y sacar a Marta por el fondo de su casa, para ponerla a resguardo.
“Gracias a la ayuda de todos ellos, mi abuela está a salvo. Más allá de las pérdidas materiales, ella está bien”, afirmó Quiroga a modo de agradecimiento.