Un nene de un año y seis meses murió ahogado en Valle Fértil y ahora la Justicia investiga en qué circunstancias ocurrió el hecho, como así también indaga para saber por qué desde el Hospital Alejandro Albarracín no dieron aviso a la Policía sobre lo ocurrido y, directamente, extendieron el certificado de defunción.
El fiscal Adrián Riveros, de la UFI N°3 de Delitos Especiales, es quien está al frente de la instrucción judicial que tiene como finalidad determinar qué fue lo que pasó con el menor, cuya identidad no trascendió, y si hubo responsabilidad de los adultos que estaban a su cargo al momento de la tragedia.
Es que según se supo, el chiquito cayó dentro de una pileta pelopincho y, a pesar de que le hicieron prácticas de reanimación, al hospital llegó sin signos vitales. Lo extraño del caso es que las autoridades del nosocomio no dieron intervención a personal policial, como lo indica el protocolo, si hay una muerte violenta que podría indicar la presunta comisión de un delito.
En ese escenario, fuentes allegadas señalaron que se investiga si hubo una omisión de parte del médico o los profesionales que atendieron al chiquito. En ese caso, se definirá una responsabilidad penal por ello.
"Estamos en plena investigación, un ayudante fiscal viajó a ese departamento para instruir lo sucedido y recolectar las pruebas necesarias. Una vez que veamos lo que tenemos, veremos si cabe responsabilidad sobre las autoridades del hospital", explicó el funcionario del Ministerio Público.
Acorde manifestaron las fuentes, como la Justicia se enteró tarde de lo acontecido, debió interrumpir el velorio del menor para llevar el cuerpo a la Morgue Judicial y someterlo a una autopsia para determinar cuáles fueron las causales del deceso.