La hija y el yerno de Julio Omar Calivar quedaron detenidos por colaborar en la fuga del empresario actualmente prófugo y acusado de abusar sexualmente de una adolescente. En el marco de la investigación la Policía Federal también secuestró celulares, computadoras y otros soportes informáticos de la casa de la pareja para buscar pistas o datos sobre su posible paradero del reconocido vendedor de motos.
Los por ahora detenidos son Cecilia Nerea Calivar y su marido Exequiel Richard Quiroga. Ambos fueron apresados este martes pasado el mediodía por efectivos de la Agencia Regional Cuyo de la Policía Federal en el domicilio de la pareja en calle Urquiza, cerca de Rivadavia, Capital.
El pedido de allanamiento y detención lo solicitó la doctora Claudia Salica, a cargo de la Fiscalía Correccional N° 5, y el juez Benedicto Correa dio la orden para que los federales realizaran el procedimiento. Tanto Cecilia Calivar como Exequiel Quiroga están imputados del delito de encubrimiento agravado. Esto porque supuestamente entorpecieron el accionar de la justicia y la situación se agrava porque ayudaron al acusado de un delito contra la integridad sexual.

Julio Calivar es investigado por el presunto delito de abuso sexual gravemente ultrajante en perjuicio de una niña de 12 años. La denuncia fue hecha en abril y en principio el empresario solicitó la eximición de prisión a través de su abogado defensor. Sin embargo, cuando el juez Benedicto Correa rechazó el pedido, Calivar desapareció de su domicilio y de los lugares que frecuentaba. Hay sospechas de que antes que salieran a detenerlo, alguien le avisó para que escapara. Eso fue en los primeros días de mayo. El juez del Quinto del Juzgado de Instrucción lo declaró prófugo, pero para entonces el empresario ya había salido del país.
Fuentes del caso señalaron que establecieron que, por esos días, Julio Calivar cruzó la frontera hacía Chile en un vehículo junto a su hija Cecilia, su yerno Exequiel Quiroga y su nieto por el paso internacional Cristo Redentor, en Mendoza. Todo eso quedó registrado, como también el regreso al país de la pareja y del niño, pero no del empresario. Esa sería la prueba de que su hija y su yerno lo ayudaron a escapar de la Argentina.
Esto condiciona más a Julio Calivar, que ahora debe estar pensando por la suerte de su hija y su yerno, mientras sigue siendo buscado por Interpol. No la tiene fácil. Además del caso que investigan en el Quinto Juzgado de Instrucción, deberá afrontar dos nuevas causas penales en su contra. A principio de mes se conoció que dos mujeres -familiares del empresario- denunciaron que sufrieron reiterados abusos sexuales por parte de Calivar. Es más, una de las supuestas víctimas dijo que tuvo un hijo producto de esos vejámenes. Esos casos son investigados por el juez Guillermo Adárvez, del Tercer Juzgado de Instrucción.