El cuerpo de la nena asesinada y quemada estaba casi
irreconocible. Los forenses aún no han podido determinar cómo fueron sus
últimas horas, desde que salió rumbo a la escuela para nunca más regresar. Pero
está la certeza de que sufrió un crimen horripilante. Un dato inquieta: uno de
los tres jóvenes detenidos por el caso había sido denunciado por abuso sexual.
El cadáver calcinado de Melanie Trinidad Rodríguez, de 8
años, fue encontrado en la madrugada de ayer en una ripiera (un predio del cual
se extrae ripio) de Fray Luis Beltrán, en el municipio de Maipú, en el Gran
Mendoza.
La nena desapareció el lunes al mediodía, cuando caminaba
para tomarse el colectivo rumbo a la escuela. "Trini”, como la llamaba su
familia, fue vista por última vez a las 12, cuando salió de su casa. Sus seis
hermanos van a otros colegios, por lo que iba sola. La encontraron tras una búsqueda
desesperada.
Horas después fueron detenidos por el crimen tres hermanos
de 18, 20 y 25 años. Son vecinos de la ripiera y llegaron hace poco al barrio
San Cayetano, ubicado en una zona rural de Maipú.
La mamá de la nena, Alejandra Rodríguez, contó que otros
vecinos la habían puesto en alerta porque escucharon que los ahora detenidos
"habían violado a un chico” del barrio. Pero la mujer dijo que "nunca” se
habían acercado a su hija ni habían sido irrespetuosos cuando se cruzaban con
ella por la zona. "Nunca imaginé que podían llegar a esto. Hay dos testigos que
los vieron quemando neumáticos en la ripiera”, reveló.
Si bien la pequeña tenía 8 años, padecía un retraso
madurativo, según contaron sus familiares. En el mediodía del lunes, salió de
su humilde vivienda, ubicada en la finca Polo de Fray Luis Beltrán, para ir al
colegio. Tenía que caminar un kilómetro por un callejón para llegar hasta la
parada del colectivo. Alrededor de las 18, la madre fue a esperarla a esa misma
parada, pero nunca llegó. Sus compañeros le contaron que no había ido a la
escuela.
"Le perdí el rastro en el camino, porque tenía que ir a
bañar a otra de mis hijas, que entra a las 14.30 a la escuela”, contó la mamá.
A mitad del callejón está la ripiera donde fue hallado el cuerpo calcinado.
"Antes de que se fuera la peiné, comió dos platos de guiso, y me dijo: ‘Chau,
mami’; fue la última vez que pude estar con ella”, relató. Sin consuelo, gemía:
"No quiero imaginar cómo habrá sufrido, qué le habrán hecho”.
Una vecina, Lucía Agüero, contó que cerca de las 15 vieron
humo en el lugar donde más tarde hallaron el cuerpo. "Es común que se queme
basura, pero jamás imaginamos que se trataría de algo tan horrible”, explicó.
Por la tarde, unos cien vecinos de la nena hicieron un
piquete para pedir seguridad y justicia. "Este lugar es una boca de lobo”, dijo
Rosa Palacio, vecina y amiga de la familia de "Trini”. "Tenemos miedo, nunca
había pasado algo así, y ahora no sabemos qué decirles a nuestros hijos, cómo
cuidarlos. En esta calle ni siquiera hay luminarias”, explicó la mujer.
Enfurecidos, varios vecinos partieron hacia la casa de los
hermanos detenidos e intentaron quemar la casa, lo que fue impedido por
policías. Había corrido la versión de que el padre de los acusados se había
fugado del barrio por temor a represalias o tal vez porque tenía algo que
ocultar.
La nena recursaba segundo grado en la escuela Lafinur. La
directora, Marisa Villafañe, contó: "Al empezar el año, como tiene una
hermanita en nivel inicial, la mamá las traía juntas en bicicleta. Pero como la
más pequeñita terminó el período de adaptación, ‘Trini’ estaba viajando en el
colectivo de línea para venir a la escuela y en el micro escolar para
regresar”. La docente confirmó el retraso madurativo de la víctima. "Tenía
abono gratuito para el micro porque tenía certificado de discapacidad”.
El papá de Trini, que está separado de la madre, y un
hermano de 18 años encabezaron la búsqueda desesperada de la nena. Fue el
adolescente quien encontró el cuerpo calcinado en la ripiera. Eso generó falsas
versiones sobre una posible participación familiar en el crimen, pero por la
tarde el fiscal Galdo Andreoni descartó esa hipótesis.
El ministro de Seguridad de Mendoza, Giani Venier,
confirmó que el mayor de los detenidos "tiene antecedentes por abuso”. Dos
testigos vieron a los tres hermanos quemando cubiertas en la ripiera. El
funcionario dio más datos de los sospechosos: "Habían sido prácticamente
expulsados de la anterior barriada por inconductas. No tienen frondosos
antecedentes, pero sí el antecedente de abuso sexual, lo que habla mucho en
este tipo de hechos”. En el barrio de Melanie nadie sabía de esto.