"Después de dos meses trabajando con la Compañía
Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico Sociedad Anónima (CAMMESA) y la
Secretaría de Energía de la Nación, nos dijeron que el resultado del pedido de
tarifa diferencial para la energía es favorable, pero hasta hoy no nos confirmaron oficialmente”,
dijo Javier Negri, gerente de Electrometalúrgica Andina.
Por el desfasaje económico que le significa a la única fábrica
de carburo de la provincia la producción sin tarifa diferencial de energía, la EMA
llevaba dos meses con sus hornos apagados. Hace una semana tuvieron que
encender un horno para poder hacer frente a los contratos con sus clientes y no
perderlos.
"El horno esta prendido y produciendo pero no alcanzamos aún
la potencia máxima porque son hornos de arranque gradual. Es el único horno
prendido y el 70 % de la gente, unas 130 personas, está trabajando, el resto está con tareas que no
están directamente relacionadas a la producción”, dijo el gerente.
El último horno se apagó el 22 de agosto, ya se habían
parado otros dos en mayo y junio. "El último paso para empezar a producir
normalmente es que nos otorguen la tarifa diferencial. Ya presentamos todo. La información
de la empresa, de rentas, los costos de energía
y su impacto. Esperamos que nos den pronto la propuesta porque no sabemos que
nos darán de lo que hemos pedido, si será tarifa plana o no, porque nosotros
elevamos sugerencias, nuestro punto de vista, pero no sabemos qué otorgarán”.
Las cifras en las que se basa la EMA para el cálculo de sus costos es tomando como modelo las empresas internacionales, "nosotros miramos como se trabaja en el mundo porque con
ellos competimos, el 80 % de nuestra producción lo exportamos”, dijo Negri.
Lo cierto es que las
empresas de Mendoza que fabrican productos similares cuentan desde hace tiempo
con tarifa diferencial que dejaba a la producción sanjuanina fuera de
competencia. Hasta ahora, la EMA había logrado mantenerse en carrera con una
cautelar dispuesta por un juez federal que le permitía acceder al precio de la
energía que pagan sus competidores. Pero esa medida tiene los días contados, rige
hasta mediados de este mes.
"Estamos muy esperanzados. Todos los días en contacto con la
gente del Ministerio de Producción preguntando
cómo van las gestiones. No se trata sólo de los empleados directos y sus
familias, sino de la mano de obra indirecta también. La empresa mueve unos 450
millones de pesos anuales de los cuales el 70 % queda en la provincia. Acá
compramos cuarzo, cal, carbón, casi todo queda en los proveedores, mano de obra
y comercio local. Es poco lo que traemos de otras provincias y sólo importamos un
3 % todo lo demás es de acá”, aseguró el gerente.
La empresa había aguantado dos meses con los hornos parados
vendiendo la producción que tenían en stock, con lo que pudieron cumplir con
sus principales clientes. "Pero se nos
acabó el stock y si bien el mercado cayó un poco, llegamos a un momento en el que
no podíamos seguir parados”.
La firma espera también la confirmación de un crédito para
capital de trabajo. "Hasta hoy subsistíamos, pero en este negocio el ciclo de
cobro demora hasta 90 días, es decir que lo que hago ahora lo cobro en enero y mientras
tanto el movimiento de capital de trabajo es intensivo”, aseguraron desde la
EMA.