A mediados de agosto los legisladores sanjuaninos supieron que iba a ingresar un mensaje del Ejecutivo para rescindir el contrato con la UTE encargada de construir el dique El Tambolar. La obra se paralizó en enero porque Cammesa dejó de pagar los trabajos. Allí arrancó un camino de ida y vuelta con las empresas y el gobierno provincial, que busca arrancar de nuevo pero de una manera distinta. El proyecto formal fue tratado en la Cámara de Diputados, donde el orreguismo consiguió darle legitimidad a la rescisión gracias a la construcción de una nueva mayoría en el recinto. Hubo apoyo bloquista, massista, del angaquero Marcelo Mallea, del calingastino Jorge Castañeda y una sorpresa: la bendición al mensaje de Orrego del diputado gramajista Gabriel Sánchez.
"Este convenio de rescisión bilateral ha sido firmado entre EPSE y la Unión Transitoria de Empresas formada por Panedile, SACDE, Sinohydro y Petersen Thiele y Cruz y tiene por objeto rescindir bilateralmente el contrato de obra celebrado el día 3 de julio de 2019", indica la fundamentación del mensaje del Ejecutivo. Entre los motivos que llevaron a darle de baja al contrato, negociación en la que participó activamente Roberto Basualdo, se encuentra la imposibilidad de retomar el ritmo de obra ante la falta de financiamiento, debido a las demoras de Cammesa en efectivizar los pagos y para reiniciar los trabajos mediante el llamado a una nueva licitación.
El orreguismo consiguió una nueva mayoría, que viene sosteniendo desde otras sesiones y que selló con el tratamiento y aprobación del RIGI. Sacó la rescisión del contrato con 19 votos a favor, entre los cuales además de los propios sumó al bloque bloquista -con tres votos-, al diputado del bloque del Este Marcelo Mallea, al massista Franco Aranda, al calingastino Jorge Castañeda, al libertario Fernando Patinella y al gramajista Gabriel Sánchez, quién se desmarcó nuevamente del peronismo y votó en consonancia con Juntos por el Cambio.
Hubo un pedido del bloquismo, que lo hizo el zondino Miguel Atampiz. El ex Intendente solicitó que se agregue en el convenio un pedido de regularización de deuda por parte de la UTE que construyó el dique Tambolar porque nunca pagó la tasa de construcción municipal. "A Dragonetti le gusta agarrar obras pero se queda con lo ajeno", dijo en relación a lo adeudado. La solicitud no pudo ser incluida porque el proyecto era un mensaje cerrado del Ejecutivo.
El voto negativo sumó 11 voluntades, entre las cuales se encuentra el grueso del uñaquismo. Entre los legisladores que hablaron estuvo Eduardo Cabello, quien además de ser diputado es secretario general de la UOCRA y de la CGT. "Los caprichos de la política se pagan muy caros. Una nueva licitación demandará al menos dos años, hay 1.200 trabajadores que están todos los días en la calle Alem -sede la UOCRA- que estaban en El Tambolar y ahora están vendiendo sus cosas para poder llegar a fin de mes", anticipando con sus palabras el voto negativo que después terminó concretándose. También se expresaron en sentido similar Juan Carlos Quiroga Moyano y Cristina López de Abarca.
El peronismo apuntó a la necesidad de aplanar la curva de inversión hasta resolver el financiamiento. "Así no vamos a mejorar las ecuaciones de electricidad y energía en la balanza nacional", agregaron.
Los giojistas se abstuvieron, el legislador del Frente Grande Horacio Quiroga no votó. Los tres argumentaron que no conocían el proyecto porque llegó muy tarde al recinto. También se encargaron de recalcar que "no están en contra de la obra pública" y que al desconocer los detalles de la iniciativa orreguista optaban por abstenerse. Hubo dos ausentes en la Cámara, uno por bloque. Por un lado, el rivadaviense Juan Cruz Córdoba y por el otro, el ullunero Leopoldo Soler.
Entre los datos del convenio con las empresas se encuentra un apartado en el cual la Provincia pide que la UTE le devuelva poco más de 2 millones de dólares que se entregaron para la compra de maquinaria. "Asimismo la UT se obliga a restituir a EPSE la suma de 2.294.758 U$S más IVA en concepto de un préstamos que le otorgó la Provincia, mediante acta acuerdo de fecha 29/12/2023, para la adquisición de una maquinaria denominada hidrofresa", indica el texto.
En la actualidad, la obra tiene un grado de certificación del orden del 41,39% y se calcula que para terminarla se necesitarán 300 millones de dólares.