El caso del pseudo cantante Franco Castro Ramírez "LMR" que estafó a 19 chicas con la promesa de grabar un videoclip está cada vez más turbulento. Es que ahora le recayó una orden de pedido de captura nacional. Y es o no es todo, todo parece indicar que hay algo más grave por detrás, porque están investigando un posible delito de trata.
Esta sospecha de los investigadores es porque algunos testimonios de las denunciantes habrían expresado que Castro Ramírez se las quería llevar para Buenos Aires haciéndole promesas de otros proyectos y conocer a otra gente. Afortunadamente, las chicas no fueron hacia este lugar y lo denunciaron por estafa. Por tal razón, las pesquisas creen que sería un posible delito de trata de personas, y si se llega a confirmar esta sospecha ya pasaría en manos de la Justicia Federal. No se trataría solo de un hecho de fraude.
Nadie sabe dónde está Castro Ramírez. Él estuvo demorado por unas horas por una contravención, pero no lo dejaron detenido; a pesar de que la Policía sabía que tenía 19 denuncias en su contra. Recuperó la libertad y no se lo vio más. Por tal razón la Justicia solicitó el pedido de captura nacional.
"La propuesta era a través de escribanos y abogados. Con contrato por un año. Salió a luz que Franco Castro hace trata de personas. Gracias a Dios 12 chicas se salvaron de lo peor. Tanto hombres como mujeres, por favor tengan mucho cuidado. Pregunten todo, investiguen todo"; expresa parte de un mensaje de las presuntas víctimas.
Una de las denunciantes aseguró que, a principio de enero, le llegó un mensaje por redes sociales y del cual buscaban a chicas jóvenes para formar el grupo de bailarinas y grabar dos videoclips junto a un cantante y acompañarlo en sus presentaciones arriba del escenario. Era trabajo: les decían que les pagarían 130 mil pesos por cada video clip y, por otro lado, les prometían que cuando firmaran el contrato se les abonaría 600 mil pesos, comentó otra de las supuestas víctimas.
Las chicas fueron sumándose poco a poco en un grupo de WhatsApp, junto con otras chicas que hacían de coordinadoras y con Franco Castro Ramírez como el supuesto cantante y jefe que dirigía el proyecto artístico. Este sujeto mantuvo una reunión personal con las muchachas y se presentó como parte de la productora de la banda cuartetera sanjuanina Omega, aseguraron en sus denuncias.
En una de esas reuniones también exigió a cada muchacha el pago de 50 mil pesos, denunciaron. Esto porque debían firmar un contrato y quería que todo se manejara de forma legal, de acuerdo a las versiones. Ellas aceptaron y le entregaron el dinero porque consideraron que eran gastos necesarios con tal de conseguir trabajo. Lo real fue que las semanas pasaron y Castro siempre daba una excusa para no firmar el contrato con ellas, mientras tanto seguían ensayando, según describieron.
Las chicas empezaron a sospechar que algo pasaba. Una de ellas se contactó con un conocido suyo que trabaja con el grupo Omega y le preguntó si Franco Castro era de la productora y si éste preparaba un proyecto musical. Esa persona se sorprendió, negó rotundamente que la banda tuviese alguna relación con Castro y mandó un audio a las chicas diciéndoles que las estaban engañando.
El lunes 27 de enero las chicas se juntaron “para ensayar” y cuando llegó Castro, estas lo increparon. Personal de comisaría 4ta lo aprehendió por una contravención, pero quedó en libertad. Ese mismo día las chicas hicieron la denuncia en UFI Delitos Informáticos y Estafas, causa que recayó en manos del fiscal Guillermo Heredia.