Un changarín buscar ir a juicio abreviado y está dispuesto a cumplir una pena de 28 años de prisión por los graves delitos que le achacan. Es que lo acusan de violar a sus dos hijas menores y de ultrajar a su hijastra. Y en caso de someterse a un juicio oral, podría recibir una condena que duplicaría esos años de cárcel.
La presentación del principio de acuerdo para el juicio abreviado fue realizada este lunes al mediodía por parte del defensor oficial, el doctor Facundo Gil –que subrogó a la defensora oficial de cámara Mónica Sefair- y la fiscal de cámara Leticia Ferrón de Rago, con el previo consentimiento del acusado de 42 años. La próxima semana se ratificaría el acuerdo y de avanzarse en el proceso, será el juez Juan Carlos Peluc Noguera el que dicte su veredicto en la Sala II de la Cámara Penal.
El sujeto, del que no se da su nombre para preservar a las víctimas, está acusado de los delitos de abuso sexual con acceso carnal, reiterado y agravado por el vínculo; abuso sexual con acceso carnal, reiterado, agravado por el vínculo y corrupción de menores en concurso ideal; y tentativa de abuso sexual con acceso carnal, agravado por la situación de guarda, informaron fuentes judiciales.
Las víctimas fueron sus propias hijas, de 7 y 8 años, y su hijastra adolescente. Los abusos supuestamente se cometieron en los últimos años dentro del seno familiar, en una casa de Chimbas, y se conocieron casi de forma casual en 2018. La primera persona que tomó conocimiento de lo que pasaba fue una maestra, quien el 4 de mayo de ese año se topó a la salida de la escuela con dos hermanitas –en ese entonces de 6 y 7 años- y les preguntó por su hermana mayor -que tenía 16 años- debido a que ésta no estaba concurriendo a clases de peluquería. Las nenas en principio contestaron con evasivas, hasta que a una de ellas se le escapó por accidente la frase: “está en cama porque el papá le hace sexo”. La docente se sorprendió y les consultó, “¿a ustedes que les hace? ¿Les toca algo?”. Con toda su inocencia, la misma niña contestó con ademanes, señalando sus partes íntimas.
El 8 de mayo de 2018, después de algunas averiguaciones sobre la familia, se radicó la denuncia en el Centro ANIVI y se abrió la investigación en el Quinto Juzgado de Instrucción. Se estableció que el changarín había sometido de todas las formas y en reiteradas ocasiones de sus hijas pequeñas. Y que en una ocasión intentó hacer lo mismo con su hijastra adolescente, sólo que no llegó a consumar la violación a raíz de que fue sorprendido por su mujer.
Fuentes judiciales indicaron que las pruebas contra este hombre son abrumadoras y por los delitos que lo acusan podría recibir hasta 60 años de cárcel. Eso explicaría de por qué pide abreviar el juicio y está dispuesto a aceptar una pena de 28 años de prisión.