Un preso al que le faltaba menos de una semana para gozar de salidas transitorias, apareció ahorcado dentro de su celda en el penal de Chimbas. El fallecido fue José Luis Alé Maldonado, el sobrino del empresario tucumano “Chancha” Alé vinculado a la desaparición de Marita Verón, quien cumplía una condena por el crimen de su cuñado ocurrido en 2011.
José Luis Alé Maldonado, de 33 años, fue encontrado sin vida por otros reos ayer pasadas las 13.30 en el interior de su celda en el pabellón 5 del Sector IV del Servicio Penitenciario Provincial, informaron fuentes judiciales y penitenciarias. Estaba colgado de una sábana anudada al cuello, explicaron. No tenía lesiones, de modo que la principal hipótesis es la del suicidio, indicaron los investigadores.
El preso estaba detenido desde 2011 por el asesinato de su propio cuñado (el hermano de su mujer) Julio Iturrieta, al que mató de un cuchillazo la noche del 24 de diciembre de 2011. Ellos ya tenían una enemistad manifiesta. Una versión decía que la víctima, sus hermanos y un amigo atacaron a Alé y éste por defenderse terminó hiriéndolo mortalmente. Por el contrario, otros testimonios indicaban que Alé golpeó a Iturrieta y después lo acuchilló.
En diciembre de 2014, los jueces de la Sala III de la Cámara Penal condenaron a Alé Maldonado a la pena de 7 años y 10 meses de prisión por el delito de homicidio con exceso en la legítima defensa. Sin embargo, la fiscal y el abogado querellante apelaron ese fallo y recurrieron a la Corte de Justicia de la provincia. En esa instancia, en octubre de 2015 el tribunal compuesto por los cortistas Adolfo Caballero, Ángel Medina Pala y José Abel Soria Vega dio vuelta ese fallo entendiendo que Ale había cometido un homicidio simple y aumentó la pena a 13 años de prisión.
Si bien su defensa apeló y de hecho recurrió a la Corte Suprema de Justicia de la Nación solicitando la nulidad del juicio, el muchacho entró aparentemente en un estado de depresión por la larga espera. Esa situación aparentemente se complicó en el último tiempo a raíz de que uno de sus hijos padece una grave enfermedad y no podía verlo. Aun así se supo que el 26 de junio, o sea la otra semana, Alé iba empezar a gozar de salidas transitorias.