A partir de las 12 los diputados se reunirán en el recinto para vivir una sesión que algunos han aventurado a señalar como histórica. Sucede que por primera vez durante la actual gestión de Javier Milei, los legisladores nacionales deberán tratar temas cruciales como los vetos a las leyes de Emergencia en discapacidad, incremento en las jubilaciones, la nueva moratoria, el reparto de recursos a las provincias, el destino de la Comisión Investigadora del caso $LIBRA, entre otros. Pero un proyecto que apareció en el temario y parece que tendrá el visto bueno sin mucho debate es el cambio del huso horario en Argentina.
La iniciativa trascendió meses atrás, cuando se conoció el proyecto de Julio Cobos. Tras ser tratado en comisiones, hoy llegará al recinto para ser debatido y votado. Conforme indica el texto del proyecto, lo que se pretende es modificar el huso horario oficial fijándolo en -04 GTM, lo que llevaría a atrasar los relojes de todo el país una hora.
El objetivo es alinear el horario nacional con la luz solar y reducir el consumo de energía eléctrica artificial.
El proyecto plantea que el huso adoptado sería el correspondiente a cuatro horas al oeste del Meridiano de Greenwich, tal como establece el Sistema Internacional de Husos Horarios. La discusión adquiere relevancia, ya que la hora oficial está fijada actualmente en -03 GMT, una modificación establecida en 1969 tras décadas de ajustes intermitentes a raíz de políticas de aprovechamiento de la luz solar en verano.
Implementar el cambio al -04 GMT traerá consecuencias inmediatas y visibles en la rutina de millones de habitantes. El retraso de una hora afectará el inicio de la jornada laboral, modificará los horarios escolares y exigirá una adaptación de los servicios públicos. La experiencia internacional sugiere que los primeros días pueden resultar incómodos, aunque a mediano plazo la ciudadanía logra ajustar sus costumbres, y los resultados suelen reflejarse en un consumo energético más eficiente.
El debate legislativo de este miércoles definirá los próximos pasos sobre la hora oficial en Argentina. Mientras tanto, la discusión se instala con fuerza tanto en el Congreso como en la agenda pública, anticipando ajustes que podrían modificar la rutina nacional después de muchos años de estabilidad en la definición horaria.