Los dos sujetos que se hicieron pasar por policías federales para controlar y requisar a ciudadanos bolivianos en un barrio de Pocito, se salvaron de ir a la cárcel. Este martes fueron sometidos a juicio en los tribunales de Flagrancia y los condenaron a 7 meses de prisión de cumplimiento condicional.
Ellos son Leonardo Fabián Luna, de 38 años, y Miguel Ángel Arranz Aciar, de 37 años, que fueron condenados por los delitos de usurpación de título y violar la cuarentena por la pandemia. Los castigaron con meses de prisión en suspenso porque no tenían antecedentes y porque el delito más grave, el atribuirse un título que no tiene, tiene una pena de 1 mes a 1 años de prisión.
Luna y Arranz Aciar a bordo de Volkswagen Gol Power fueron el domingo a la noche al barrio 27 de Septiembre en Pocito y, fingiendo ser policías federales de civil, empezaron a control a los autos y a requisar a sus ocupantes, todos de la comunidad boliviana. El escándalo se desató cuando algunos les vieron cara conocida y les pidieron que se identificaran, pero estos respondían eran policías “encubiertos” y estaban haciendo su trabajo, tras lo cual se retiraban a otro lugar del barrio y repetían la maniobra.
La situación incomodó a los vecinos, que se dieron cuenta que no eran policías federales. Al ver el alboroto, los sujetos se fueron en el auto. Sin embargo, la gente se reunió y fue buscarlos hasta que los encontró en un domicilio de calle Vidart, al Sur de 7. Ahí los increparon y casi los toman a golpes. Justo llegaron los policías de la Seccional 7ma y la Unidad Operativa Teresa de Calcuta, quienes detuvieron a Leonardo Fabián Luna y Miguel Ángel Arranz Aciar.
Este martes ambos acordaron un juicio abreviado en el Sistema Especial de Flagrancia, donde la fiscal Ana Lía Larrea solicitó la pena de 7 meses de prisión en cumplimiento condicional. Esta fue refrendada por el juez Ricardo Grossi.