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SUSCRIBITETras la nota a Tiempo de San Juan, desde el mítico negocio -ubicado en avenida Rawson y calle San Luis- dieron a conocer la fecha que dejará de funcionar. En la nota, las historias de 'Pipo' Flores y un anuncio impactante.
'Pipo' Flores habló de la historia de su parrillada con Tiempo. Foto: Leandro Porcel.
Lo anunció el propio 'Pipo' Flores a Tiempo de San Juan. Su histórica parrillada cerrará las puertas, tras más de 50 años en actividad y de ganarse el corazón de los sanjuaninos y los turistas. Luego de la nota publicada, la familia del célebre parrillero confirmó cuándo será el último adiós al negocio.
Según informaron a este diario, la última noche de la parrillada de 'Pipo' será el próximo sábado 7 de junio. Por este motivo, desde el negocio invitaron a degustar las especialidades de la casa, ubicada en Avenida Rawson esquina San Luis.
Durante más de cinco décadas, la parrillada Pipo se consolidó como un emblema gastronómico de San Juan, gracias a la calidez de su fundador, Felipe Eduardo Flores, y a la calidad de su comida, especialmente la icónica punta de espalda. El local, ubicado en una esquina céntrica de la ciudad, se convirtió en un punto de encuentro para sanjuaninos y turistas, con una impronta de cercanía y amistad que marcó su historia.
‘Pipo’, como es conocido, anunció el cierre de su negocio con profunda gratitud hacia todos los que formaron parte de su vida: clientes, empleados, proveedores y amigos. Con emoción recordó cómo siempre mantuvo la misma calidad en los productos y cómo el fuego de la parrilla fue testigo de miles de historias compartidas. Su despedida estuvo cargada de agradecimiento y nostalgia.
La vida de Flores estuvo marcada por el esfuerzo y el sacrificio. Criado en Concepción, trabajó desde joven en distintos oficios, incluso emigró a Estados Unidos para mejorar su situación económica. Al regresar a San Juan, apostó por un emprendimiento gastronómico que con el tiempo se transformó en una leyenda local, rodeado de amigos y colaboradores clave en su camino al éxito.
El gran aporte de Pipo a la gastronomía sanjuanina fue la popularización de la punta de espalda como corte estrella. Antes relegada al puchero, él descubrió su potencial en la parrilla y creó una técnica única para prepararla rápidamente, logrando una combinación irresistible de sabor y textura. Su fama fue tal que incluso atrajo a políticos, figuras nacionales y extranjeros, entre ellos un presidente argentino y visitantes internacionales.
Aunque el cierre de la parrillada marca el fin de una era, ‘Pipo’ no lo considera un adiós definitivo. Planea disfrutar de su tiempo libre, seguir conectado con la música y los amigos, y no descarta volver de algún modo al ruedo. El legado de su negocio, su estilo inconfundible y la inolvidable punta de espalda seguirán siendo parte de la memoria colectiva de San Juan.
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