Franco Colapinto fue anunciado como nuevo piloto de la escudería Alpine y mucho tuvo que ver Flavio Briatore, el hombre fuerte del equipo francés. El empresario italiano es un mito viviente en el mundo de la F1, estuvo presente en la época dorada de la categoría y fue el que desde un principio puso su atención en el argentino. Con un video desde un avión, así anunciaba su llegada: "Viva la Argentina", tiró.
Embed - Tiempo de San Juan on Instagram: "Flavio Briatore, el propulsor y gestor de la llegada de Colapinto a Alpine: así anunciaba su ‘fichaje’ al equipo francés El piloto argentino fue confirmado como reserva y podría volver a correr en 2025. El encargado de hacer oficial la información fue Flavio Briatore, el empresario italiano que es un mito en la Fórmula 1. Desde el asiento de un avión, grabó un video y remató con un “¡Viva la Argentina!”. La nota completa en @tiempodesanjuan #francocolapinto #f1 #alpine #williams"
Con una vida plagada de excentricidades, polémicas, dinero, escándalos y mucho más, el principal asesor de Alpine reconoció el potencial de Colapinto y su influencia destrabó las negociaciones para llevar al argentino a cumplir su objetivo.
Quién es Flavio Briatore, el mito viviente en la Fórmula 1
El nombre de Flavio Briatore se convirtió en un sinónimo de la Fórmula 1. Incluso, aquellos que no están familiarizados con el automovilismo lo han escuchado alguna vez. El empresario italiano montó un imperio en la F1, se convirtió en un personaje fundamental de la categoría, estuvo involucrado en uno de los escándalos más grandes, y se caracteriza por tener un ojo clínico para las futuras promesas. Colapinto acaba de sumar su nombre a su lista.
Sus inicios se dieron en la marca de moda italiana Benetton, donde fue creciendo poco a poco hasta ser fundamental en cada decisión. Incluso, fue el encargado de la expansión en América, con un éxito rotundo.
En medio de decisiones comerciales, la marca de indumentaria decidió abrirse paso en el mundo del automovilismo: compraron al equipo Toleman y Briatore fue nombrado como director comercial. En cada paso fue tomando más influencia y su punto máximo fue con la contratación de un joven piloto alemán que deslumbraba y tenía pasta de campeón: Michael Schumacher.
La contratación del múltiple campeón del mundo estuvo envuelta en escándalo y Briatore mostró sus primeras artimañas para los negocios. En la lucha por quedarse con el piloto estaban Jordan y Benetton. La escudería inglesa tenía todo avanzado, pero el empresario italiano se metió en el medio, sedujo a Schumi, a su representante y terminaron usando un hueco legal para firmar el contrato.
Así, Schumacher se consagró campeón en dos oportunidades con Benetton en 1994 y 1995.