Una historia muy particular con las bicicletas es la que tiene Juan Luis Guardia, un cartonero de 26 años oriundo de Los Médanos, Caucete. El viernes 8 de noviembre le pasó de todo. A las 15, le robaron su bicicleta al lado de un trozadero. La había dejado apoyada enfrente de donde estaba lavando un auto. De repente, desapareció, ya no estaba. Su herramienta de trabajo, una playera negra que él mismo había comprado, había sido robada.
Horas más tarde, en un acto de buena fe, un muchacho de la chacharita donde Juan Luis vende sus cartones le prestó otra playera, una azul. Pero el destino le jugó otra mala pasada, esta vez en calles Fermín Rodríguez y Diagonal Sarmiento. Mientras él iba en el vehículo prestado detrás de un colectivo de línea 19, se le apareció un automóvil que lo impactó de frente, haciéndole golpear su cabeza contra el paragolpe. Se raspó la pierna y se lastimó la nariz, por lo que le sangró y tuvo que ser hospitalizado. Así estuvo en observación hasta las 8 del sábado, cuando le dieron el alta. La bicicleta que le habían prestado, no anduvo más.
Su historia conmocionó a sus amigos y conocidos. Gente de buen corazón de Caucete se preocupó por este joven que con su trabajo de juntar cartones y llevarlos a la chacharita llega a juntar hasta $500 por día, según contó. Tal es el cariño que le tienen, que Valentín, un hombre que se dedica a vender panchos y hamburguesas sobre la calle Juan José Bustos, le regaló una bicicleta todoterreno. De esta manera, Juan Luis podrá volver a trabajar, aunque según dijo, tiene miedo de volver a salir a la calle.