Elegir correctamente qué comer antes y después del ejercicio es una de las dudas más comunes entre quienes buscan mejorar el rendimiento físico y acelerar la recuperación muscular. Para aclarar este tema, la nutricionista Elena Pareja, directora del equipo de nutrición de Metropolitan, compartió recomendaciones prácticas que fueron destacadas por Women’s Health y que coinciden con los lineamientos de la Escuela de Salud Pública de Harvard.
Qué comer antes de entrenar
Según Pareja, la clave está en combinar carbohidratos fáciles de digerir con proteínas ligeras, una fórmula que aporta energía sostenida sin generar pesadez. Esta base nutricional ayuda a entrenar con mayor eficiencia y evitar molestias digestivas.
La especialista recomienda ajustar la comida según el tiempo disponible
Con 2 a 3 horas antes de entrenar:
Optar por una comida completa pero liviana:
- arroz blanco con pollo
- tostada integral con crema de maní
- yogur natural con avena
Con 45 a 60 minutos previos:
Un snack simple es suficiente:
- banana
- yogur
- barrita liviana
Con menos de 30 minutos, lo ideal es solo una fruta para evitar malestar.
Qué comer según el tipo de ejercicio
El plan alimentario también depende de la actividad que se va a realizar:
- Entrenamientos de fuerza: priorizar proteínas y carbohidratos complejos.
- Ejercicio cardiovascular moderado (correr, bicicleta): aumentar los carbohidratos para obtener energía sostenida.
- Rutinas intensas (HIIT, CrossFit): elegir carbohidratos de rápida asimilación y algunos alimentos con sal para reponer electrolitos.
- Yoga o pilates: comer muy liviano o entrenar en ayunas, para evitar sensación de pesadez que pueda afectar la respiración.
Qué comer después del ejercicio
Finalizada la actividad, el objetivo es recuperar energía y reparar el tejido muscular. Pareja recomienda combinar:
- Proteínas: yogur griego, huevo, pollo, tofu, legumbres.
- Carbohidratos: fruta, avena, papa, arroz, pan integral.
- Entre las opciones prácticas para el post-entrenamiento figuran el yogur griego con frutos rojos, tortilla con tostada integral, salmón con arroz y vegetales o un batido de proteína con banana.
¿Cuándo conviene comer después de entrenar?
La nutricionista aclara que no es obligatorio ingerir alimento en los primeros 30 minutos, como solía recomendarse. Si no se comió nada en las horas previas, es conveniente hacerlo entre los 30 y 60 minutos posteriores. Si sí hubo una comida adecuada antes del ejercicio, esperar hasta dos horas no representa un problema.
Harvard respalda este enfoque: lo más importante es la alimentación equilibrada del día completo, más que el minuto exacto en que se come.
Qué evitar antes y después del entrenamiento
Pareja aconseja no consumir:
- comidas pesadas, fritos o embutidos grasos
- medialunas o facturas cerca del ejercicio
- batidos con mucha grasa o fibra
- exceso de café en personas sensibles
- alcohol después de entrenar
- alimentos muy grasos que dificulten la absorción de nutrientes
Conclusión
Las recomendaciones coinciden en un punto esencial: mejorar el rendimiento y favorecer la recuperación no depende solo de lo que se come antes o después del entrenamiento, sino del cuidado constante de la alimentación diaria. Una dieta equilibrada sigue siendo el principal aliado para obtener resultados y sostener una buena salud física.