El Ministerio de Economía autorizó que a partir del consumo del domingo 1° de septiembre haya un nuevo aumento en los servicios de gas y electricidad. También se aplicará una suba a los precios de los combustibles nafta y gasoil, como ocurrió el primer día del mes durante todo el año. Se espera que el aumento sea del 4% para las boletas energéticas, mientras que los precios de los combustibles subirían, en promedio, 2,5%.
El monto final de las boletas de energía se compone del costo de tres servicios más el recargo de los impuestos y tasas nacionales, provinciales y municipales. Equivale al costo de generar electricidad o producir gas (que tiene subsidios del Tesoro), el de transportar la energía a los centros de consumo y el de distribuirla en hogares, comercios e industrias. Los últimos dos servicios no están segmentados según el nivel de ingresos y, por lo tanto, el costo es igual para todos los hogares.
Desde este mes, el ministro de Economía, Luis Caputo, autorizó que los servicios de luz y gas aumenten para bajar el gasto en subsidios a la energía. Además, se permitirá de nuevo a las empresas de distribución y transporte -entre las que se encuentran Edenor, Edesur, Metrogas, Camuzzi, Naturgy, TGN y TGS- actualizar sus cuadros tarifarios.
Si bien en abril el Gobierno había fijado que los ingresos de estas empresas iban a subir todos los meses según una fórmula polinómica, la variable de ajuste nunca llegó a aplicarse. Unas horas antes de comenzar el mes de mayo, Caputo anunció que se postergaba el aumento.
“En tarifas queda por aumentar, pero este año ya hicimos la parte más importante. Las tarifas es una sintonía fina entre caja, o reducción de subsidios, e inflación. A algunos les gustaría ver un horizonte de más largo plazo, pero la realidad es que lo decidimos mes a mes porque la prioridad es bajar la inflación. También la prioridad es [cuidar] la caja, pero en la medida en que podamos terminar antes con la inercia inflacionaria, eso es más ventajoso. Ya no hay razones macroeconómicas para que haya inflación”, había dicho el ministro en una entrevista radial.
En lo que se refiere a combustibles, en el sector esperan que la suba de precios de nafta y gasoil sea en torno al 2,5% a nivel país.
Desde que asumió Javier Milei, el valor de los combustibles aumentó 135% en los primeros siete meses del año, muy por arriba del 86% de inflación acumulada. Esto se explica por el aumento de los impuestos al sector, que estaban congelados por el gobierno anterior desde 2020 y, según el gobierno, por el atraso que tenían los precios anteriormente.