El pasado miércoles 22 de abril, un hombre, de apellido Salem, se presentó en la Justicia y denunció a su exmujer por violencia de género. Como etapa provisoria, el caso lo tomó el Juzgado de Paz Letrado del departamento de San Martín, de donde son oriundos los protagonistas de la causa.
Este lunes, el magistrado sanmartiniano llamó a ambos para una audiencia. Salem no presentó pruebas para determinar que había sido golpeado. A la hora de declarar de la mujer, de apellido Riveros y asesorada por Filomena Noriega, contó que en realidad era él quien la había golpeado constantemente. Incluso, relató un hecho en donde Salem le rompió el tabique de un cabezazo. También afirmó que la denuncia del hombre era para evadir pagar la cuota alimentaria de los 4 hijos que tienen en común.
Ante esta situación, el juez revirtió la causa y decidió imponerle a Salem una orden de alejamiento de 300 metros respecto de su expareja. Además, el hombre deberá pagar $10.000 de cuota alimentaria más $5.000 para el pago de alquiler de la casa donde viven sus hijos, y le prohibieron todo acto o manifestación verbal, físico o virtual que cause malestar en la mujer. De inmediato, se le notificó la resolución.