Este próximo miércoles era una fecha que estaba señalada como una posible vuelta para Ander Herrera. El español había trabajado a la par durante semanas y se perfilaba para sumar minutos ante Atlético Tucumán, por los 16avos de la Copa Argentina en Santiago del Estero. Pero en el entrenamiento de este lunes, el panorama cambió drásticamente.
Durante los trabajos tácticos realizados en Boca Predio, el volante sintió una molestia muscular que encendió nuevamente las alarmas. En principio, Miguel Ángel Russo tenía planeado incluirlo en la nómina de convocados, pero la reciente dolencia lo marginará otra vez. A esta hora, es casi un hecho que quedará afuera del partido.
En el cuerpo técnico hay una gran preocupación porque la situación de Herrera ya se volvió recurrente. Desde su llegada, apenas pudo sumar minutos con continuidad y cada intento de regreso terminó con una nueva lesión. Incluso, Russo había optado por no apurarlo en el empate contra Unión, a pesar de que venía entrenando bien.
La idea en Boca es clara: si Ander está bien, puede ser el socio ideal para Leandro Paredes en el mediocampo. Incluso, así lo entiende el entrenador, quien había elogiado su influencia en el juego antes de la lesión en el Mundial de Clubes. "Cuando salió, perdimos ubicación y forma", sostuvo tiempo atrás.
Por ahora, Herrera será sometido a estudios médicos para determinar la gravedad de la molestia. De confirmarse un desgarro u otra lesión muscular, sería la quinta desde su arribo a comienzos de 2025. El regreso, una vez más, deberá esperar. Y su futuro, empieza a tambalear.
El once de Boca que probó Miguel Ángel Russo:
Leandro Brey; Juan Barinaga, Mateo Mendía, Marco Pellegrino, Lautaro Blanco; Williams Alarcón, Leandro Paredes, Milton Delgado; Brian Aguirre, Edinson Cavani y Alan Velasco.