La Selección argentina, que cuenta con el debut como entrenador de Edgardo Bauza, terminó el primer tiempo ante Uruguay con diez hombres porque sobre la hora el chileno Julio Bascuñan expulsó a Paulo Dybala, por doble amarilla, en un fallo discutido ya que la primera tarjeta fue exagerada. El delantero de la Juventus jugó su primer partido como titular con la camiseta de la Selección y tenía muchas expectativas sobre el mismo, por eso al ver la roja no aguantó la tristeza y se retiró de la cancha llorando.