Sobre las 11 de este miércoles, detuvieron a un delincuente, identificado como Federico Caballero, de 35 años, por ingresar a un taller de la Villa Anita, en Rivadavia y robarle las pertenencias a uno de los trabajadores. Según fuentes policiales, el malviviente entró al local pidiendo ingresar al baño.
Le dijeron que sí y, previo a entrar, observó que los trabajadores del taller Zamora dejaban sus pertenencias cerca del baño, tomó una mochila y se metió. Vieron que el ladrón se demoraba. Uno de los empleados fue a ver qué le pasaba y justo salió el malviviente.
Luego, entró el empleado y descubrió que su billetera estaba tirada en el suelo, sin el dinero. De inmediato salió y comenzó a perseguir al delincuente. Al mismo tiempo, sus colegas llamaron al 911. Personal policial del Grupo Táctico de la Departamental Nº 3, a cargo del oficial Juan Sánchez, pudo atraparlo en un descampado del interior de Villa Italia.
Ya no tenía el dinero robado, casi $300 dijeron los efectivos, pero sí le hallaron una biblia, entre sus pertenencias. Según los policías, el ladrón conocido en el ambiente delictivo y ya estuvo detenido en el Penal de Chimbas. "Hay presos que salen a robar con biblias para que cuando los atrapen, los policías crean que ellos ya cambiaron y no cometen hechos delictivos. A nosotros nos dicen que anda predicando la palabra de Dios", dijo una fuente policial. Quedó a disposición del juzgado correccional de turno.