A través de un video que se viralizó en TikTok, una joven argentina de 27 años denunció en México que su marido la mantuvo secuestrada durante dos años, e hizo un dramático pedido de ayuda para poder regresar al país. "Temo por mi vida y la de mi hijo".
Priscila Sand da su testimonio leyendo una especie de borrador que ella misma preparó. Y lo hace mirando a cámara diciendo que el apunte es "para no olvidarse de nada". Una historia que comenzó en julio de 2023 cuando la joven conoció a quien sería su pareja en un restaurante mexicano y que tiene este violento y abrupto final.
En el video, la joven de Campana denuncia que su esposo, Salvador Zubirán Rabay, la habría secuestrado dentro de su propia casa ubicada en el DF de México. Y, siempre según su relato, pudo escapar junto a su bebé de nueve meses de un cautiverio en que la mantenía su marido hace dos años.
"Hago público este testimonio porque las autoridades hasta ahora no pudieron hacer nada -cuenta desde el Distrito Federal mexicano-. Y no quiero que nadie vuelva a ser víctima de Salvador". Y reveló: "Siento miedo. Vivía completamente vigilada, lejos de mi familia y sin poder tomar decisiones por mi misma".
Embed - No es fácil contar esto. Pero lo hago para resistir, para proteger y para que ninguna más viva lo que yo viví. No me escondo más. Ahora me toca hablar.
Además, enumeró una serie de hechos aberrantes que se volvió más extremo tras el nacimiento de su hijo. "El me violentó, me controló cada segundo. Tanto que llevo tres tatuajes con su nombre en mi cuerpo que me obligó a ponerme". Luego contó que quiso escapar en un par de oportunidades, pero que bajo amenazas al resto de sus familiares no pudo lograr el objetivo de escape.
En medio de la lectura descriptiva, Sand se quiebra en llanto. "La casa donde vivía estaba llena de cámaras, micrófonos, sensores de movimiento y guardias -describió la joven-. No podía moverme sin que él supiera. Y si mi hijo enfermaba ni siquiera podía llevarlo al médico. Fui víctima durante mucho tiempo de su violencia física y sexual".
"Si quería salir a caminar, tenía que pedir permiso, y si me dejaba, iba con alguien acompañándome. Si quería cortarme el pelo, venía alguien a casa. Y los fines de semana si salíamos al shopping, siempre era con él. Si quería ir al baño, dos personas de seguridad me acompañaban y me esperaban afuera”, enumeró.
La mujer denunció que "la obligaba a tomar medicamentos que sacaba a nombre de su abuelo", y que su esposo es alguien muy poderoso del país. "Con el dinero de su familia ha comprado jueces, abogados y policías de investigación para seguir violentando mujeres. Es una persona sumamente peligrosa", reveló. Y dijo tener pruebas de cómo "manejaba a policías y jueces para a través del miedo, extorsionar y manipular a sus víctimas".
"Siempre está rodeado de guardias armados. En la calle y en su casa. Ostenta ser protegido por la Fiscalía de México. Consume drogas. Tanto él como sus guardaespaldas están armados. Siempre", detalló.
Y denunció que en el momento que pudo burlar a la guardia y escapar con su hijo de 9 meses, su esposo estaba construyendo una habitación de pánico para encerrarla definitivamente ahí.
Cómo fue el escape de la joven argentina
Con su hermana gemela, Priscila ideó un plan de escape. Estudió durante varios días los movimientos de la custodia, y esperó un descuido en un cambio de turno: logró salir corriendo con su hijo en brazos y un bolso; y tomó un auto de aplicación con el que pudo huir de su propia casa.
"Pude escapar con una amiga y un guardia nos persiguió armado", describió. Y confirmó que ese 15 de abril, día en que logró escapar, presentó la denuncia en la Oficina Antisecuestro. Y aguardó la ayuda policial en la casa "de una persona conocida".
También enumeró que su esposo tiene denuncias de parejas anteriores en la capital mexicana por secuestro, maltrato, violación, amenazas y violencia de género, pero que hasta el momento "nadie hizo nada". "Vivo aterrorizada", resumió con dolor.
La mujer confirmó que al otro día que pudo escapar, su esposo la denunció por "violencia familiar" y que su hijo tiene "pedido de búsqueda" porque "se lo llevó por la fuerza de su casa". Es decir, con el "Alerta Ámber" emitido, Sand no puede salir del país sin ser detenida. Una pesadilla.
Ya pidió ayuda en la Embajada argentina, pero tampoco obtuvo novedades. En medio del pedido de auxilio para poder regresar al país, la joven denunció que desde que escapó, su familia está siendo amenazada permanentemente desde distintos números telefónicos.
Por último, Sand ensayó una especie de ruego con voz entrecortada y al borde del llanto. "Hago este video para que nadie más viva lo que yo viví. Les pido a los jueces, fiscales y policías que no permitan que este hombre siga actuando de manera impune. Que se haga justicia", cerró.