Hay que remontarse a un siglo atrás, épocas donde casi no había estadísticas para encontrar un consumo de carne vacuna per cápita tan bajo en la Argentina.
Para continuar, suscribite a Tiempo de San Juan. Si ya sos un usuario suscripto, iniciá sesión.
SUSCRIBITEHay que remontarse a un siglo atrás, épocas donde casi no había estadísticas para encontrar un consumo de carne vacuna per cápita tan bajo en la Argentina.
Según los datos de la bolsa de comercio de rosario, el consumo de carne vacuna por habitante durante el 2021 fue de 47.8 kilos por persona.
Para tener una dimensión del drama, se puede citar el máximo histórico, que se dio durante la segunda presidencia de Juan Perón, en 1954. Allí, los argentinos consumieron, por persona, 102 kilos de carne vacuna.
Ese fue un record absoluto, muy por encima del promedio que, entre 1914 y 2021 marcó 73.4 kilos. Pero durante los 3 últimos años del gobierno de Mauricio Macri, y los dos de Alberto Fernández, es promedio se derrumbó a 54.5 kilos, con este dato de 47.8 kilos en 2021.
Es cierto que culturalmente los hábitos alimenticios se han modificado. Ni el vegetarianismo ni el veganismo eran moneda corriente hace tan solo 25 o 30 años, pero este dato no puede explicar la tremenda caída. En los números ha impactado, indudablemente, la caída de las condiciones socioeconómicas de los consumidores.
Hoy la carne bovina ahora representa el 44 % de los 109,4 kilogramos por habitante por año de proteínas animales, cuando a principios de este milenio representaba entre el 60 % y el 70%.
Contenido especial