El pasado 30 de agosto entró en funcionamiento el Juzgado de Faltas y Convivencias de Pocito, y con él, el Código de Faltas y Convivencias, estableciendo diversos parámetros en pos de lograr la armonía en la sociedad. Sin duda uno de los ejes llamativos en su momento fue la penalización del acoso callejero, algo que a nivel provincial no está calificado como delito. A tres meses de su puesta en marcha, el titular de tribunal departamental detalló como vienen trabajando.
Entre algunas de las pautas que establece el Código se encuentran las faltas, conflictos vecinales, salubridad y tránsito. En ese sentido, el juez Sergio Escamilla detalló a Tiempo de San Juan que del total de denuncias que se recibieron por el edificio donde funciona el juzgado, el 90% son por conflictos de convivencia vecinal.
“Tenemos 27 denuncias. Teniendo en cuenta los días que ha trabajado el juzgado, que son los días hábiles, estamos hablando de casi una denuncia por día”, explicó el magistrado.
En el top de los reclamos registrados se encuentran quejas por contaminación sonora, problemas de humedad en paredes colindantes y problemas de relación vecinal, algunos de ello de vieja data. “En la mayoría de los casos el denunciado adopta las medidas necesarias para, de alguna manera, reparar la situación. Hay voluntad de los vecinos de llegar a un acuerdo. Al tener medios alternativos de resolución de conflicto, la mayoría de las contravenciones se resuelven por estos medios alternativo, es como la mediación, también conocida como conciliación”, remarcó Escamilla.
Si bien hay reincidencia, el magistrado de Pocito señaló que se trata de casos aislados y que la mayoría de las denuncias lograron llegar a buen puerto en el marco de un mes.
Dentro del trabajo que viene realizado el Juzgado de Faltas y Convivencias, sin duda el dato llamativo es lo que sucede con el acoso callejero. Cuando se conoció que dentro del Código se incluía la figura del “acoso sexual callejero” hubo un gran revuelo sobre cómo sería su aplicación y la pena que le cabría a la persona que incurra en el delito.
Al ser el acoso callejero un flagelo el cual se viene combatiendo desde hace tiempo, desde la institución esperaban que tuviera una mayor repercusión, pero esto no fue así.
“Sobre el tema de acoso callejero, a pesar de la difusión que tuvo, no hemos recibido ninguna denuncia hasta el momento”, detalló Escamilla. Y continuó: “Creo que tiene que ver con una cuestión que no ha sido recibido por el vecino del departamento, por desconocimiento. También puede responder a que, al ser una sociedad muy chica, por vergüenza prefieren no denunciar”.
Pese a ello, y con el balance de los primeros tres meses de trabajo, el juez aseguró que se va a reforzar la comunicación como también enfatizar sobre los puntos del Código de Faltas y Convivencias departamental.
Dónde denunciar cualquier inconveniente vecinal, acoso callejero, entre otros
El Juzgado de Faltas y Convivencia de Pocito, está ubicado en calle Marco Zalazar y Picón, Villa Aberastain.
El vecino se puede acercar por la mesa de entrada del juzgado y realizar la denuncia como también recibir asesoramiento.
“Tienen que asistir con el DNI y se les hace llenar un formulario. Acá mismo los ayudamos a completarlo y se inicia el procedimiento”, remarcó el juez Sergio Escamilla.