Mientras Illya Kuryaki probaba sonido en el escenario principal del Estadio Abierto, bien pegadas al portón, esperando ansiosas entrar y conseguir los mejores lugares, había un grupito de 5 chicas de unos 15 años esperando desde las 10 de la mañana poder ver a Márama.
De esta manera quedaba ilustrada la variedad de gustos que marcó el público del escenario mayor de la Fiesta de la Primavera, donde comparten escenario la mítica banda funk de los 90 y el conjunto de cumbia pop.
Las chicas que iban a ver Márama se diferenciaban del resto por sus vinchas, remeras y banderas con la foto y el nombre de la banda. Ese color lo aportaban los vendedores, que a lo largo de la fila se encontraban vendiendo todo el merchandising.
No faltó el color deportivo, donde se pudo ver en especial los colores de River, equipo que llegó este miércoles después de las 19 a la provincia para jugar la Copa América.