Con el covid-19 aún presente y la segunda cepa tocando la puerta, desde la Iglesia Católica informaron que las misas de Semana Santa serán distintas y con protocolos sanitarios para evitar el contagio. Durante el 2020, las celebraciones se dieron sin fieles y se transmitió en vivo. Este año, se permitirá el 40% de la ocupación en los templos y se exigirá distanciamiento, uso de tapaboca y alcohol en gel. Debido a que está permitido menos de la mitad de la ocupación, se realizarán más celebraciones para maximizar la cantidad de fieles que asistan. Además, implementarán otros cambios.
Este domingo se celebra el Domingo de Ramos, que da inicio a la conmemoración de la Semana Santa. Este año, las iglesias no entregarán los ramos de olivo bendecidos, sino que los fieles deberán llevarlos y el cura bendice el ramo en el lugar.
La procesión de los Vía Crucis se permitirá solo dentro de los templos y parroquias. Se permitirá un grupo reducido de personas para portar la cruz y las velas que sean necesarias. Mientras que el resto de los fieles pueden presenciarlo, pero no sumarse.
En cuanto a la Misa Crismal del miércoles Santo, se prohibirá la asistencia de feligreses y sólo estarán presentes los curas. El jueves Santo, por otro lado, no se realizará el tradicional lavado de pies de los fieles para que no haya contacto físico entre personas. Se hará la celebración recordando la importancia de la tradición, que aboca a cuando Jesús le lavó los pies a sus apóstoles.
Cada templo dispone de sus horarios. En el caso de la Iglesia Catedral, el domingo habrá misas a las 9, 11 y 20 horas. Además, todas las misas y celebraciones serán transmitidas por canales de televisión y redes sociales.